Una nueva vitrina para el disfrute del chocolate abrió sus puertas en la ciudad de Miami de la mano de las hermanas venezolanas Isabel y Susana García Nevett, quienes tras casi una década dedicadas al fascinante mundo del considerado "alimento de los dioses", vieron cristalizado el sueño de tener su propio espacio: una hermosa tienda ubicada en el sur de la ciudad del Sol, bautizada con sus apellidos: Garcia Nevett Chocolatier, en la que destacan, entre otras delicias, unos finos bombones de autor. La oferta la completan una torta de chocolate, una fondant, galletas, frutas cubiertas de chocolate y nips.   

Son aproximadamente 24 bombones los que mantienen en rotación, cuatro de ellos galardonados en la más reciente edición de los International Chocolate Awards: el Florida Keys Sea Salt, una ganache acompañado con sal de los cayos de Florida; el Orange Honey Caramel, caramelo con jugo fresco de naranja y miel también de los Cayos; Patanemo, otro ganache, de chocolate negro 70% elaborado con cacao cultivado en esa ciudad costera del estado Carabobo, y Macha, ganache de chocolate blanco, leche de almendras y el famoso té verde japonés. 

Estos son los primeros premios de Garcia Nevett Chocolatier, mas no los de Isabel y Susana. Periodista la primera y arquitecto la segunda, cuentan que el chocolate las acompañó desde su infancia, "como en muchos hogares venezolanos". "Mi abuela preparaba el chocolate caliente delicioso, estaba la torta de chocolate de la tía, mis papas cuando viajaban nos traían chocolates de regalo, era algo que siempre había en la casa", recuerda Isabel, quien ubica la primera creación hace unos 20 años, cuando a Susana se le ocurrió obsequiar chocolates elaborados por ella para Navidad. Así nació el interés por aprender el oficio de manera profesional, una se formó en París y la otra en Chicago. 

En Caracas fundaron Latitud 10 Chocolate Artesanal. Luego, por razones personales, deciden radicarse en Miami manteniendo el foco en el chocolate pero con un nuevo nombre: Cacao Art, con el que ganan varios premios y reconocimientos como el Good Food Awards, el Snail of Approval del Slow Food Miami, la inclusión en la lista The Miami Herald's South Florida Food 50, y el International Chocolate Awards. Empezaron en sus propias cocinas para luego pasar a una comercial, atendiendo clientes al detal y al mayor, sobre todo para eventos corporativos, acostumbrándose al mercado local, "muy distinto al de Venezuela", aclara Isabel, al tiempo que destaca la importancia de educar al consumidor estadounidense en cuanto a la calidad del cacao venezolano y de los bombones que elaboran. 

Tras varios estudios decidieron que, una vez más, era necesario cambiar de nombre y se decantaron por sus apellidos García Nevett, para reforzar el concepto de que están ofreciendo algo íntimo, personal, como lo son sus creaciones culinarias. La tienda, ubicada en el sector de South Miami, destaca por su elegancia. Al fondo está la vitrina y detrás de esta, el taller, el lugar donde sucede la alquimia. Es allí donde experimentan combinando sabores y texturas, donde ven cristalizadas las mil y una idea de Susana, que Isabel, más metódica, encausa. Es un espacio de lujo que invita al comensal a degustar productos también de lujo.

Su materia prima principal es el chocolate oscuro, 60% hacia arriba, hecho en Venezuela y en otros países que trabajan con cacao venezolano. Para los rellenos, muchos de ellos inspirados en su memoria gustativa, como el bombón de Anís y Papelón que rememora el sabor de los golfeados, usan ingredientes orgánicos incluidos frutos de temporada. 

Con una nueva nominación a los Good Food Awards 2019, ya tienen disponible en su página web nuevos productos de temporada en la tienda. Conscientes de la situación que se viven en Venezuela, se aliaron con la ONG Alimenta la Solidaridad para niños en situación de pobreza, destinando todas las ganancias obtenidas por la venta de su caja de nueve bombones a esta labor.