"El poeta debe ser una voz de alerta en la sociedad". Esta frase del español Victoriano Crémer toma vigencia en los tiempos tan convulsos que vive el país, y mañana, por el Día Mundial de la Poesía, 40 poetas y actores alzarán sus voces en un canto por la verdad, la libertad, y lo más importante: la vida.
El evento, llamado Poesía en voz alta. Una lectura por la vida y la libertad, fue organizado por Cultura Chacao, con el apoyo de Jacqueline Goldberg, Flavia Pesci-Feltri, Luna Benítez y Elisabetta Balasso en alianza con organizaciones poéticas como Qué Leer, Autores Venezolanos, Team Poetero, Fundación para la Cultura Urbana, Pen Club Venezuela, Letralia, La Parada Poética y Dale Letra, así como la ONG Provea y editoriales de la talla de Óscar Todtmann Editores, Eclepsidra, Dcir Ediciones, Letra Muerta y Gisella Capellín Ediciones, que fungen también de coordinadores.
Amparados bajo el verso "Florecemos/ en un abismo", de Rafael Cadenas, se reunirán a las 4:00 pm en la plaza Los Palos Grandes, donde el propio poeta participará en compañía del embajador de Italia, Silvio Mignano, y de Armando Rojas Guardia, Adriana Gibbs, Ana María Hurtado, Ana María Velázquez, Arturo Gutiérrez Plaza, Astrid Lander, Beatriz Alicia García, Carmen Verde, Daniela Jaimes-Borges, Edda Armas, Edgar Vidaurre, Elisabetta Balasso, Flavia Pesci Feltri, Gabriela Kizer, Gisela Cappellin, Graciela Yáñez Vicentini, Héctor Caldera, Joaquín Marta Sosa, Joaquín Ortega y Jorge Gómez Jiménez.
También estarán los poetas José Antonio Parra, Karla Castro, Leonardo Melero, Luis Gerardo Mármol, María Clara Salas, María Gabriela Rosas, María Antonieta Flores, Milagros Socorro, Moraima Guanipa, Rafael Castillo Zapata, Ricardo Ramírez Requena, Roberto Echeto, Rodrigo Lares, Samuel González-Seijas, Sonia Chocrón, Tibisay Guerra, Tina Oliveira, Yeiber Román y Yoyiana Ahumada .
Igualmente estarán los actores Javier Vidal y su hijo Jan, Julie Restifo, Héctor Manrique y Luigi Sciamanna.
Para María Antonieta Flores, el papel del poeta es ser testigo de estos tiempos, dar testimonio de los procesos que se están viviendo, y dejar un registro de su transformación.
Añade que en las actuales generaciones han sido marcadas por el afuera, ese mundo externo lejos de la introspección del poeta, con sus complejidades y problemas, por lo que son dignos de respeto.
A sus 22 años, Yeiber Román, representante de esas generaciones, desea demostrar que a pesar del abismo, se puede prevalecer y resistir a los atropellos, y a los intentos cada vez más desalmados por desaparecer los espacios culturales que quedan en el país.
"En estos tiempos difíciles, la palabra es lo que nos sostiene y da la fuerza para seguir resistiendo".
Es entonces donde aplican las palabras de Gabriel Celaya: "La poesía es un arma cargada de futuro". Y también de esperanza.
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