Berlín.- Catherine Deneuve y Christian Bale son los actores más destacados del 69º Festival de cine de Berlín, cuyo programa fue difundido ayer y cuenta con numerosos filmes de mujeres, entre las cuales figura la española Isabel Coixet, reseña Afp.
En los 11 días de competición –del 7 al 17 de febrero–, este festival, que junto al de Cannes y al de Venecia son los más importantes del mundo, proyectará 400 filmes, entre ellos Marighella, del brasileño Wagner Moura, que forma parte de la sección oficial pero no entrará en la pugna por los Osos de Oro o de Plata.
El filme que sí peleará por los galardones, junto a otros 16, será Elisa y Marcela, de la directora Isabel Coixet, que narra la historia real de una pareja de lesbianas españolas que llegaron a conseguir casarse en 1901.
Entre las 17 películas del programa oficial, siete son de directoras, como Mr. Jones, de la polaca Agnieszka Holland, o The Kindness of Strangers, de la danesa Lone Scherfig, que inaugurará el festival.
El jurado estará presidido por la actriz francesa Juliette Binoche, y contará entre sus miembros con el director chileno Sebastian Lelio y la actriz británica Trudie Styler.
La legendaria actriz francesa Catherine Deneuve, por el filme L'adieu à la nuit, de André Téchiné; el británico Christian Bale por Vice, de Adam McKay, y su compatriota Diane Kruger por The Operative, son las principales estrellas que desfilarán por la alfombra roja, aunque por filmes fuera de competencia.
La película Touch Me Not, de la directora rumana Adina Pintilie, se hizo con el Oso de Oro en la edición de 2018.
Se tratará de la última edición de la Berlinale dirigida por el alemán Dieter Kosslick tras 18 años al frente. Su testigo lo recogerá un dúo: el italiano Carlo Chatrian y la holandesa Mariette Rissenbeek.
"El mundo audiovisual hace frente hoy a una gran transformación", dijo ayer Kosslick, de 70 años, en la conferencia de prensa de presentación del programa, aludiendo a la irrupción de plataformas de cine en Internet, como Netflix.
Kosslick invitó al mundo del cine a aceptar estas nuevas formas de consumo del séptimo arte, porque "el mundo ha cambiado".
"Estoy convencido de que los festivales de cine no sólo perdurarán, sino que cobrarán importancia por mostrar filmes que no estarán al alcance en ningún otro lugar", añadió Kosslick.
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