“Mi regreso a la actuación es un intento por conseguirle un gusto a la vida. Nunca pensé hacerlo, lo hago casi como un ejercicio para que me vuelvan las ganas de vivir”, expresó Marisela Berti en la entrevista que el 25 de marzo del año pasado publicáramos aquí en El Universal, a dos años de la muerte de su esposo, el director cinematográfico Mauricio Walerstein, un triste episodio del cual hasta entonces no se reponía. Y su regreso al arte histriónico fue nada menos que a través de El señor de los cielos, en su sexta temporada, la serie más exitosa de Telemundo Internacional, en el rol de una embajadora de Venezuela en México, chavista para más señas-, personaje que escribió personalmente para ella Luis Zelkowicz, su amigo y creador de la serie.
La sexta temporada de El señor de los cielos terminó a finales de 2018, con el mismo suceso de las anteriores, y desde entonces deseábamos preguntarle a la actriz cómo fue su experiencia allí y si le había sido útil para el propósito de recuperarse anímicamente de la tristeza que la embargaba. Su respuesta fue más que ilustradora: “Mi experiencia fue la mejor terapia emocional que he tenido en este duelo, los días que me tocaba grabar me olvidaba de todas mis tristezas y era feliz. Nunca tendré con qué pagarle a Luis (Zelkowicz) este apoyo. Si me vuelven a ofrecer algo como actriz, lo haré, sin duda. Recordar mi época de actuación y todo lo que enriqueció mi vida resultó un regalo; fue como si la vida me dijera: ‘Recuerda quién fuiste, qué hiciste y, sobre todo, que esto sucedió antes de ser pareja de Mauricio”.
Días después, vía Instagram, la vimos en una foto en Puerto Rico con su nieta Sofía, hija de Luis Armando Avellanet Berti, el hijo que tuvo en su matrimonio con el cantante Chucho Avellanet. “Mi nieta Sofía y yo compartimos todo con amor -decía el texto del post-, le prometí cuidarme y estar feliz para compartir muchos más momentos juntas. Tengo salud y mucha gente que me quiere. Este año prometo ser feliz, que es lo que me merezco, no más tristeza. Hay Marisela para rato”. Previamente, dos días antes, en una foto en actitud reflexiva y nostálgica en la playa de El Condado, había escrito: “Hay una edad en que decimos más ‘adiós’ que ‘hola’ , pero con Puerto Rico siempre será un ‘hasta luego’. Hoy me despido del remanso del mar y regreso a casa. Voy con las pilas recargadas”.
Son señales de que Marisela, ha retomado su vida con nuevos ímpetus. Aunque sin olvidar la huella emocional que le dejó el amor de su vida, se siente en capacidad de afrontarla a través de su trabajo como actriz y del cultivo de sus afectos más preciados, como el de la pequeña Sofía. Bien por ella y también por su amplia legión de seguidores, que hemos recuperado el placer de disfrutar del arte de una artista sencillamente fuera de serie.
Piaf en México
Mariaca Semprún, otra talentosa actriz venezolana que cautiva en ámbitos internacionales, hará una nueva temporada en México de Piaf, Voz y delirio, el musical sobre la atormentada vida de la leyenda de la canción francesa, Edith Piaf. Las funciones en la capital azteca se realizarán del 17 al 27 de enero en el Centro Cultural Teatro 1, para luego proseguir en gira hacia Puebla, Toluca, Guadalajara, San Luis Potosí, Monterrey, Morelia y Querétaro.
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