El escritor y hombre de televisión Boris Izaguirre la calificó muy apropiadamente como “una comedia que no le tiene miedo al drama”. Hablamos de Esperando al italiano, de Mariela Romero, uno de los grandes éxitos del teatro venezolano, que con motivo de los 30 años de su estreno se estará presentando en el Centro Cultural BOD, los días 30 de noviembre y 1 y 2 de diciembre. Exhibida por primera vez, con notable respaldo de crítica y público, en la Sala Alberto de Paz y Mateos de El Nuevo Grupo, contó con las actuaciones de Liliana Durán, Belén Díaz, Estelita Del Llano, Malú del Carmen y Gilberto Pinto, con dirección de Armando Gota.
Aún mayor resonancia tuvo la nueva versión de la obra, realizada en 2010, esta vez en el Trasnocho Cultural, bajo la dirección de Tulio Cavalli y un elenco integrado por Carolina Perpetuo, Caridad Canelón, Hilda Abrahamz, Tania Sarabia y Hernán Marcano. Se mantuvo en cartelera durante seis exitosas temporadas, con dos giras al interior del país presentadas a sala llena. Y entre 2015 y 2017, se escenificó en Londres, Madrid, Tenerife, Miami, Houston y Orlando. Por otra parte, Esperando al Italiano ha sido traducida y representada en inglés, sueco, noruego y alemán.
La trama muestra a tres amigas, acompañadas de una hilarante doméstica y un viejo y pusilánime camarada, que narran sus miserias un sábado por la noche mientras esperan, entre nostálgicas evocaciones, cantos y juegos, la llegada de un macho italiano, al que ellas han contratado a distancia, para satisfacer y cambiarle el color a sus mustias, monótonas y frustradas existencias.
En su obra, Mariela Romero subraya la anécdota a partir de la angustia y vida sin sentido de María Antonia, Teresa y Rosalba, tres inolvidables personajes que tejen duras metáforas que golpean contundentemente las dictaduras, las injusticias sociales y todas aquellas condiciones que fundamentaron un estatus de inferioridad para la mujer latinoamericana. Además, es un emocionado canto a la amistad y, como lo señaló en su momento el dramaturgo Isaac Chocrón, “la evocación nostálgica de una Venezuela profundamente libre que se niega a desaparecer”.
Mariela Romero es una de nuestras dramaturgas más solventes y prolíficas y sus obras han sido representadas o publicadas en Latinoamérica y Europa. En televisión también tiene una destacada trayectoria, con más de treinta y cinco producciones realizadas en casi todos los países hispanoamericanos y Estados Unidos, donde reside. En el montaje aniversario que veremos en el teatro del BOD estará el mismo elenco que la presentó en 2010, a excepción de Alejandro Corona, quien sustituirá a Hernán Marcano. El director volverá a ser también Tulio Cavalli. La oportunidad será propicia para, en clave de comedia, reencontrarnos con esa Venezuela viva que tanto nos representa y caracteriza. Y mucho más allá, pues no en balde estudiosos del teatro internacional contemporáneo la consideran como una de las obras que mejor representa la idiosincrasia de la mujer latinoamericana.
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