Los personajes Frenita Fernández “La gaga”, Comadre Jacinta, Poneme a Mamá y La Benteveo, entre otros, permitieron a Nelly Pujols popularizar su carrera. Pese a que en los últimos años la industria de la televisión venezolana ha ofrecido muy pocas opciones para el humorismo, la actriz y comediante continúa vigente en la memoria del público, con el aval y las credenciales para recordar la época dorada del buen humor que vivió el país.
La también locutora, escritora y psicopedagoga se mantiene fiel a la idea de que la televisión es el medio informativo de mayor alcance. Sin embargo, Pujols opina lo contrario cuando se refiere a las redes sociales, aunque consciente de su alcance, recientemente estrenó un podcast dedicado al humor sin restricciones, el cual está disponible en la plataforma HispanoTV.
“Pienso que para una persona que empieza desde las redes sociales es muy difícil tomar en cuenta una serie de cosas que sí teníamos en épocas anteriores, donde contabas con un guion bien montado, un director que te daba el norte y un gran equipo de personas”, dice la encargada de dar vida al popular personaje de Flora.
La exintegrante del recordado Show de Joselo y otros programas como Cheverísimo y el célebre Radio Rochela destaca la labor de su relevo. “Hoy en día, vemos en redes sociales, algunos que son excelentes, por ejemplo Marko Music, él es un muchacho que viene del teatro. Él no empezó con las redes, aunque ahí se hizo famoso. Pienso que Marko viene de esa escuela, donde se aprende de una buena manera, a través de la experiencia”, explica Pujols.
“Con las redes sociales hay que tener medida. Muchos de los llamados influencers salen solamente con un teléfono y dicen tres cosas y a lo mejor la gente se ríe, pero eso no trasciende como los personajes que se hacían antes. Si te pones a ver, las redes sociales son muy malagradecidas, porque tú haces una cosa hoy y luego a los tres días ya la gente ni se acuerda de lo que hiciste. Entonces, es algo bien duro”, expresa la experta de la comedia.
No obstante, quien por años se ha dedicado al arte de hacer reír, reflexiona acerca de las situaciones que han afectado la industria del humor. “Justamente la falta de programas humorísticos en la televisión, que es el medio informativo, que digan lo que digan, es el más amplio, que permite que la familia entera pueda sentarse en la sala de su casa a ver un programa, la falta de eso ha contribuido a la generación de cristal. Hace muchos años, yo hacía a una tartamuda que parecía que iba a decir una grosería, pero en realidad estaba haciendo algo simpático. Pero, ahora por eso te pueden decir que te estás es burlando”, menciona la artista.
Y prosigue: “También hice a una bizca en el sketch de Asocerro. Las personas desde un teclado pueden decir cualquier cosa y nadie sabe quién es. A veces te dicen una serie de cosas que te hacen pensar que la gente está llena de odio. Afortunadamente, ellos son los menos. Pienso que realmente, las redes son muy duras”.
La también locutora, escritora y psicopedagoga se mantiene fiel a la idea de que la televisión es el medio informativo de mayor alcance. Sin embargo, Pujols opina lo contrario cuando se refiere a las redes sociales, aunque consciente de su alcance, recientemente estrenó un podcast dedicado al humor sin restricciones, el cual está disponible en la plataforma HispanoTV.
“Pienso que para una persona que empieza desde las redes sociales es muy difícil tomar en cuenta una serie de cosas que sí teníamos en épocas anteriores, donde contabas con un guion bien montado, un director que te daba el norte y un gran equipo de personas”, dice la encargada de dar vida al popular personaje de Flora.
La exintegrante del recordado Show de Joselo y otros programas como Cheverísimo y el célebre Radio Rochela destaca la labor de su relevo. “Hoy en día, vemos en redes sociales, algunos que son excelentes, por ejemplo Marko Music, él es un muchacho que viene del teatro. Él no empezó con las redes, aunque ahí se hizo famoso. Pienso que Marko viene de esa escuela, donde se aprende de una buena manera, a través de la experiencia”, explica Pujols.
“Con las redes sociales hay que tener medida. Muchos de los llamados influencers salen solamente con un teléfono y dicen tres cosas y a lo mejor la gente se ríe, pero eso no trasciende como los personajes que se hacían antes. Si te pones a ver, las redes sociales son muy malagradecidas, porque tú haces una cosa hoy y luego a los tres días ya la gente ni se acuerda de lo que hiciste. Entonces, es algo bien duro”, expresa la experta de la comedia.
No obstante, quien por años se ha dedicado al arte de hacer reír, reflexiona acerca de las situaciones que han afectado la industria del humor. “Justamente la falta de programas humorísticos en la televisión, que es el medio informativo, que digan lo que digan, es el más amplio, que permite que la familia entera pueda sentarse en la sala de su casa a ver un programa, la falta de eso ha contribuido a la generación de cristal. Hace muchos años, yo hacía a una tartamuda que parecía que iba a decir una grosería, pero en realidad estaba haciendo algo simpático. Pero, ahora por eso te pueden decir que te estás es burlando”, menciona la artista.
Y prosigue: “También hice a una bizca en el sketch de Asocerro. Las personas desde un teclado pueden decir cualquier cosa y nadie sabe quién es. A veces te dicen una serie de cosas que te hacen pensar que la gente está llena de odio. Afortunadamente, ellos son los menos. Pienso que realmente, las redes son muy duras”.
La comediante apoya a las asociaciones de venezolanos que abogan para que el Estatus de Protección Temporal (TPS) sea reconsiderado (CORTESÍA HISPANO TV)
Cáncer con humor
Nelly Pujols aún recuerda el día en que mientras almorzaba con su familia, recibió una llamada para informarle que tenía cáncer en grado tres. “Esa palabra que empieza por la letra C que a mí no me gusta mencionarla, es una enfermedad con un proceso bien duro, no solo para quien la sufre, sino para toda la familia. Esa es una enfermedad que toca mal a todos”, dice.
“Aquí (en Estados Unidos), el médico te lo dice claro y raspado. Te podrás imaginar que ni hice digestión, porque se te va el mundo. Luego de eso, el hecho de informarlo a tu familia. Todo eso es algo sumamente duro porque cuando te dicen el resultado de los exámenes, es como que si la familia entera tuviera esa enfermedad”, agrega.
Ante tal situación, la actriz se propuso a superar la enfermedad. “No me tiré en una cama. De hecho, yo llegaba de la inmunoterapia a mi casa y me tomaba un vino. Mi vecina me decía: ‘¿Te vas a tomar un vino?’, y yo le respondía; ‘Sí, ¿qué más me puede pasar?’. Pero fueron tiempos muy duros. De hecho le agarré un terror a las agujas que cuando veo una salgo corriendo media cuadra. Ahora puedo decir que gracias a Dios estoy muy bien”, comenta Pujols.
Residenciada en “Doralzuela”, durante casi dos años Pujols recorrió varias ciudades de Estados Unidos con el espectáculo En USA ni la uso, que casualmente aborda -desde el humor-, la difícil vida de un inmigrante. Ahora, vive de cerca y con preocupación la situación de sus coterráneos. Dice que apoya la labor de asociaciones de venezolanos que están abogando para que el Estatus de Protección Temporal (TPS) sea reconsiderado.
Mientras tanto, Nelly Pujols disfruta de su podcast, donde ha entrevistado a Luis Chataing, Juan Carlos Barry y Nené Quintana. Siempre coincide con sus colegas exiliados en Estados Unidos y también conserva un grupo de WhatsApp con ellos, en el cual también están Emilio Lovera, Laureano Márquez y Claudio Nazoa. “Conversamos de todo lo que pasa aquí y en mi país, pero nunca te sientes igual lejos de tu país, en donde quiera que estés, por muy bien que estés”, concluye una de las grandes figuras del humor en Venezuela.
@EduardoMuriaa
Cáncer con humor
Nelly Pujols aún recuerda el día en que mientras almorzaba con su familia, recibió una llamada para informarle que tenía cáncer en grado tres. “Esa palabra que empieza por la letra C que a mí no me gusta mencionarla, es una enfermedad con un proceso bien duro, no solo para quien la sufre, sino para toda la familia. Esa es una enfermedad que toca mal a todos”, dice.
“Aquí (en Estados Unidos), el médico te lo dice claro y raspado. Te podrás imaginar que ni hice digestión, porque se te va el mundo. Luego de eso, el hecho de informarlo a tu familia. Todo eso es algo sumamente duro porque cuando te dicen el resultado de los exámenes, es como que si la familia entera tuviera esa enfermedad”, agrega.
Ante tal situación, la actriz se propuso a superar la enfermedad. “No me tiré en una cama. De hecho, yo llegaba de la inmunoterapia a mi casa y me tomaba un vino. Mi vecina me decía: ‘¿Te vas a tomar un vino?’, y yo le respondía; ‘Sí, ¿qué más me puede pasar?’. Pero fueron tiempos muy duros. De hecho le agarré un terror a las agujas que cuando veo una salgo corriendo media cuadra. Ahora puedo decir que gracias a Dios estoy muy bien”, comenta Pujols.
Residenciada en “Doralzuela”, durante casi dos años Pujols recorrió varias ciudades de Estados Unidos con el espectáculo En USA ni la uso, que casualmente aborda -desde el humor-, la difícil vida de un inmigrante. Ahora, vive de cerca y con preocupación la situación de sus coterráneos. Dice que apoya la labor de asociaciones de venezolanos que están abogando para que el Estatus de Protección Temporal (TPS) sea reconsiderado.
Mientras tanto, Nelly Pujols disfruta de su podcast, donde ha entrevistado a Luis Chataing, Juan Carlos Barry y Nené Quintana. Siempre coincide con sus colegas exiliados en Estados Unidos y también conserva un grupo de WhatsApp con ellos, en el cual también están Emilio Lovera, Laureano Márquez y Claudio Nazoa. “Conversamos de todo lo que pasa aquí y en mi país, pero nunca te sientes igual lejos de tu país, en donde quiera que estés, por muy bien que estés”, concluye una de las grandes figuras del humor en Venezuela.
@EduardoMuriaa
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