Daniela Ramírez: “Hay muchas historias de mujeres invisibilizadas”
La actriz chilena protagoniza la miniserie "Isabel", sobre la autora de "La casa de los espíritus", que emiten HBO Max y Amazon Prime Video
Isabel Allende es la escritora latinoamericana más emblemática y exitosa, pero nadie se había atrevido a contar su historia en la pantalla. Protagonizada por Daniela Ramírez y Néstor Cantillana, bajo la dirección Rodrigo Bazaes Nieto, el canal chileno Mega desarrolló el proyecto Isabel con el respaldo del fondo CNTV. En la actualidad, la miniserie de tres capítulos puede ser vista por las plataformas de HBO Max, en Estados Unidos, y Amazon Prime Video para toda Latinoamérica.
Daniela Ramírez (Santiago de Chile, 1987), quien interpreta a Isabel Allende, empezó en la actuación desde muy niña, en la escuela, y a los 14 años se integró a una compañía de teatro; desde ese momento supo que su vida era la actuación. Con una carrera consolidada en su país, le llegó la internacionalización con Isabel.
Sobre su trabajo, el director de la miniserie afirma: “Consiguió construir la esencia de una personalidad recorriendo casi treinta años de su vida, no es el mismo personaje el que parte, que el que termina la serie. No buscábamos una caracterización gruesa, sino una con la que pudiéramos empatizar y comprender a pesar de sus sombras. Daniela le dio humanidad, y mucho sentido del humor, a todos esos aspectos”.
-¿Cómo llegó al proyecto?
-Estuve desde un principio. Esto fue un proyecto que se financió con fondos estatales y participamos en una convocatoria. Hicimos un piloto, donde me llamaron para hacer el personaje, en esa experiencia entendí que si bien podía hacerlo, era un desafío. Cuando nos ganamos la convocatoria, el personaje fue para mí, lo agradezco porque pude construirlo desde el principio.
-La serie muestra varias facetas de Isabel Allende. ¿Cuál fue la que requirió mayor esfuerzo interpretativo?
-La producción decidió que yo hiciera todas las etapas de Isabel en la serie, así que sin dudas la etapa más compleja fue la última, cuando Isabel tenía cincuenta años. Esto implicó un proceso de caracterización para que yo me viera mayor, también hubo un peso y una densidad actoral distinta. Para mí fue un gran hallazgo representar a una mujer madura.
-Sé que tuvo la oportunidad de conocer a Isabel Allende, ¿qué le impresionó de ella en ese encuentro?
-Me impresionó su simpatía, su sentido del humor, su sencillez; me sentí muy cómoda con ella. Creo que es una mujer muy normal; es decir, no sientes la espectacularidad del personaje que uno conoce, es una mujer muy centrada y sus opiniones son muy brillantes.
-En su último libro, Isabel Allende dice “Los hombres temen al poder femenino”. ¿Qué opina sobre el movimiento #MeToo y cómo se está viviendo esto en Chile?
-Si existiera paridad desde nuestros orígenes como civilización humana, las mujeres tendrían un gran liderazgo. Isabel Allende siempre ha llevado la bandera feminista desde sus comienzos, no significa lo mismo luchar en esos tiempos que luchar ahora con el movimiento más consolidado y masificado, cuando las mujeres nos estamos atreviendo a decir basta con los abusos y la violencia. En Chile se impulsó con la marcha del 8 de marzo de 2018 donde miles de mujeres chilenas salieron y se consolidó como un movimiento poderoso.

Daniela Ramírez (Santiago de Chile, 1987), quien interpreta a Isabel Allende, empezó en la actuación desde muy niña, en la escuela, y a los 14 años se integró a una compañía de teatro; desde ese momento supo que su vida era la actuación. Con una carrera consolidada en su país, le llegó la internacionalización con Isabel.
Sobre su trabajo, el director de la miniserie afirma: “Consiguió construir la esencia de una personalidad recorriendo casi treinta años de su vida, no es el mismo personaje el que parte, que el que termina la serie. No buscábamos una caracterización gruesa, sino una con la que pudiéramos empatizar y comprender a pesar de sus sombras. Daniela le dio humanidad, y mucho sentido del humor, a todos esos aspectos”.
-¿Cómo llegó al proyecto?
-Estuve desde un principio. Esto fue un proyecto que se financió con fondos estatales y participamos en una convocatoria. Hicimos un piloto, donde me llamaron para hacer el personaje, en esa experiencia entendí que si bien podía hacerlo, era un desafío. Cuando nos ganamos la convocatoria, el personaje fue para mí, lo agradezco porque pude construirlo desde el principio.
-La serie muestra varias facetas de Isabel Allende. ¿Cuál fue la que requirió mayor esfuerzo interpretativo?
-La producción decidió que yo hiciera todas las etapas de Isabel en la serie, así que sin dudas la etapa más compleja fue la última, cuando Isabel tenía cincuenta años. Esto implicó un proceso de caracterización para que yo me viera mayor, también hubo un peso y una densidad actoral distinta. Para mí fue un gran hallazgo representar a una mujer madura.
-Sé que tuvo la oportunidad de conocer a Isabel Allende, ¿qué le impresionó de ella en ese encuentro?
-Me impresionó su simpatía, su sentido del humor, su sencillez; me sentí muy cómoda con ella. Creo que es una mujer muy normal; es decir, no sientes la espectacularidad del personaje que uno conoce, es una mujer muy centrada y sus opiniones son muy brillantes.
-En su último libro, Isabel Allende dice “Los hombres temen al poder femenino”. ¿Qué opina sobre el movimiento #MeToo y cómo se está viviendo esto en Chile?
-Si existiera paridad desde nuestros orígenes como civilización humana, las mujeres tendrían un gran liderazgo. Isabel Allende siempre ha llevado la bandera feminista desde sus comienzos, no significa lo mismo luchar en esos tiempos que luchar ahora con el movimiento más consolidado y masificado, cuando las mujeres nos estamos atreviendo a decir basta con los abusos y la violencia. En Chile se impulsó con la marcha del 8 de marzo de 2018 donde miles de mujeres chilenas salieron y se consolidó como un movimiento poderoso.

"Los prototipos estéticos que encasillan a la mujer como objeto sexual se están desarmando", afirma la intérprete. CORTESÍA
-¿Cree que son necesarias más historias de mujeres latinoamericanas tanto en el cine como en las series?
-Es el momento para hacerlo. Hay muchas historias invisibilizadas de mujeres que han sido extraordinarias y que han generado cambios. Es un acierto apostar por historias que sean protagonizadas por mujeres.
-¿Qué otra mujer chilena debería ser llevada a la pantalla?
-Gladys Marín. Fue una mujer activista y defensora de los derechos humanos en la dictadura de Pinochet. Su historia debe ser contada.
-Si bien usted tiene éxito en su país, indudablemente Isabel le está dando visibilidad internacional. ¿Le gustaría explorar actoralmente otros mercados?
-Me encantaría experimentar nuevos desafíos en Latinoamérica y en el resto del mundo. Espero que se abran puertas, yo estaría feliz de trabajar en otros países y empaparme de otras culturas y poder representarlas.
-Con todos estos cambios que se han vivido en el mundo, ¿cree que para una mujer la carrera de actuación es más sencilla o sigue experimentando los prejuicios en cuanto a la edad y el físico?
-Los prototipos estéticos que encasillan a la mujer como objeto sexual o que representan a un canon de belleza, se están desarmando, se están debilitando, cada día se vuelven más obsoletos. Cada día las mujeres nos sentimos más orgullosas de nuestros cuerpos y nuestras identidades. En cuanto a la carrera, la actuación es compleja y difícil, en realidad es una pasión, algo instintivo que te moviliza y te hace sentir vivo. Cuando uno hace lo que le gusta es feliz, especialmente si logras conmover con las historias que representas.
-Y finalmente, ¿cómo es la ventana por dónde ve Daniela Ramírez?
-A través de la actuación, que es lo que más me apasiona.
@DulceMRamosR
-¿Cree que son necesarias más historias de mujeres latinoamericanas tanto en el cine como en las series?
-Es el momento para hacerlo. Hay muchas historias invisibilizadas de mujeres que han sido extraordinarias y que han generado cambios. Es un acierto apostar por historias que sean protagonizadas por mujeres.
-¿Qué otra mujer chilena debería ser llevada a la pantalla?
-Gladys Marín. Fue una mujer activista y defensora de los derechos humanos en la dictadura de Pinochet. Su historia debe ser contada.
-Si bien usted tiene éxito en su país, indudablemente Isabel le está dando visibilidad internacional. ¿Le gustaría explorar actoralmente otros mercados?
-Me encantaría experimentar nuevos desafíos en Latinoamérica y en el resto del mundo. Espero que se abran puertas, yo estaría feliz de trabajar en otros países y empaparme de otras culturas y poder representarlas.
-Con todos estos cambios que se han vivido en el mundo, ¿cree que para una mujer la carrera de actuación es más sencilla o sigue experimentando los prejuicios en cuanto a la edad y el físico?
-Los prototipos estéticos que encasillan a la mujer como objeto sexual o que representan a un canon de belleza, se están desarmando, se están debilitando, cada día se vuelven más obsoletos. Cada día las mujeres nos sentimos más orgullosas de nuestros cuerpos y nuestras identidades. En cuanto a la carrera, la actuación es compleja y difícil, en realidad es una pasión, algo instintivo que te moviliza y te hace sentir vivo. Cuando uno hace lo que le gusta es feliz, especialmente si logras conmover con las historias que representas.
-Y finalmente, ¿cómo es la ventana por dónde ve Daniela Ramírez?
-A través de la actuación, que es lo que más me apasiona.
@DulceMRamosR
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