Espacio publicitario

Elecciones desesperuanas

A no ser que Castillo nos sorprenda como ya lo hizo Ollanta Humala y resulte un presidente sensato, lo que se avecina en Perú es un periodo sumamente inestable, pero no el fin del mundo....

  • JORGE SAYEGH

11/06/2021 05:03 am

¿En qué momento se había j… el Perú? Se pregunta incesantemente Zavalita, alter ego de Vargas Llosa, a lo largo de su cautivante, abrumadora e intensísima Conversación en La Catedral. Como en el resto de Hispanoamérica, ha habido no uno, sino muchos momentos. Innumerables, imprecisos. Por lo tanto no se puede definir un punto específico que diferencie un antes armónico y un después distópico en el curso del país hermano.
Pero lo que ha ocurrido en las recientes elecciones presidenciales es bastante anómalo. Ningún candidato pudo seducir ni a un 20% del electorado y —con eso— el país entero tuvo que procesar una segunda elección donde había que elegir entre un dudoso profesor sindicalista que enarbolaba la ideología política que más dictaduras asesinas ha establecido en la historia de la humanidad; y la hija-ex-Primera-Dama de un autócrata corrupto —que entre algunas gracias dictatoriales hubo de secuestrar y torturar a su propia esposa, madre de la actual candidata— quien ha construido una fuerza política con base en la más absoluta falta de ética.

Aceptémoslo, el Perú no la tenía fácil.

Sin embargo el agónico triunfo de Castillo quizás no termine de ser tan apocalíptico como pronostican los analistas más doñas-del-Cafetal. Para empezar, incluso añadiendo los votos de sus aliados circunstanciales, no cuenta ni con el 30% del Congreso. A diferencia de Chávez, Castillo está muy lejos de ser un líder carismático que enamore a las masas. De hecho casi el 50% de electores votó contra su proyecto y la mitad de los que él mismo obtuvo son más “anti-Keiko” que “pro-Castillo”. Es extremadamente improbable que Castillo logre la anuencia popular en el referendo que prometió para cambiar la Constitución y poner en marcha su plan chavistoide de hacerse del aparato gubernamental.

A no ser que Castillo nos sorprenda como ya lo hizo Ollanta Humala y resulte un presidente sensato, lo que se avecina en Perú es un periodo sumamente inestable, pero no el fin del mundo.

@JorgeSayegh
Siguenos en Telegram, Instagram, Facebook y Twitter para recibir en directo todas nuestras actualizaciones
-

Espacio publicitario

Espacio publicitario

Espacio publicitario

DESDE TWITTER

EDICIÓN DEL DÍA

Espacio publicitario

Espacio publicitario