Guillermo Lasso ha ganado la presidencia del Ecuador, y todos los comprometidos con la libertad debemos aplaudir este triunfo para que Ecuador no se convierta en otra Venezuela.
Conocí personalmente a Guillermo Lasso a finales de la década de 1990, cuando él era Gobernador de la Provincia del Guayas y yo estaba trabajando en Ecuador promoviendo la dolarización. En 1997 publiqué en Caracas un libro llamado “La segunda muerte de Bolívar” donde propuse la dolarización de Venezuela e incluso entregué personalmente a Hugo Chávez antes de ser electo presidente en 1998. En 1999 publiqué un libro similar en Ecuador con el nombre “La segunda muerte de Sucre” sobre la muerte de la moneda ecuatoriana bajo una hiperinflación naciente y la necesidad imperante de dolarizar la economía.
Entonces escribí que el presidente Jamil Mahuad había destruido el valor de la moneda ecuatoriana y matado a Sucre por segunda vez. Incluso expliqué como el Sucre estaba tan “aguadito” que había que llamarlo el “mahuadito” pues Mahuad destruyó la moneda con el nombre del héroe nacional ecuatoriano. Pero eso no era una ofensa solo para el pueblo ecuatoriano, sino también para el pueblo venezolano, pues Antonio José de Sucre era venezolano y fue héroe también en los otros países bolivarianos como Colombia, Perú y Bolivia.
La idea del “mahuadito” estaba inspirada en el comentario del expresidente Abdalá Bucaram cuando le dijo al expresidente Rodrigo Boja que tenía el “esperma aguadito”, lo cual fue muy comentado en Ecuador en su momento y era una frase famosa entonces. Así que yo me referí al “mahuadito” por la destrucción del Sucre y Jamil Mahuad pidió mi expulsión del Ecuador, que fue anunciada por Guillermo Lasso en Guayaquil, donde me encontraba en ese momento.
Años más tarde me encontré de nuevo con Lasso en una conferencia en la Casa de América, donde también participaba Mario Vargas Llosa y muchas otras personalidades del mundo liberal iberoamericano, y le recordé cuando me expulsó del Ecuador siguiendo órdenes del “mahuadito”. Le dije que le perdonaba y que le apoyaba, que además esperaba que fuera presidente de su país. Hoy celebro que Lasso es presidente de Ecuador.
www.cordeiro.org
Conocí personalmente a Guillermo Lasso a finales de la década de 1990, cuando él era Gobernador de la Provincia del Guayas y yo estaba trabajando en Ecuador promoviendo la dolarización. En 1997 publiqué en Caracas un libro llamado “La segunda muerte de Bolívar” donde propuse la dolarización de Venezuela e incluso entregué personalmente a Hugo Chávez antes de ser electo presidente en 1998. En 1999 publiqué un libro similar en Ecuador con el nombre “La segunda muerte de Sucre” sobre la muerte de la moneda ecuatoriana bajo una hiperinflación naciente y la necesidad imperante de dolarizar la economía.
Entonces escribí que el presidente Jamil Mahuad había destruido el valor de la moneda ecuatoriana y matado a Sucre por segunda vez. Incluso expliqué como el Sucre estaba tan “aguadito” que había que llamarlo el “mahuadito” pues Mahuad destruyó la moneda con el nombre del héroe nacional ecuatoriano. Pero eso no era una ofensa solo para el pueblo ecuatoriano, sino también para el pueblo venezolano, pues Antonio José de Sucre era venezolano y fue héroe también en los otros países bolivarianos como Colombia, Perú y Bolivia.
La idea del “mahuadito” estaba inspirada en el comentario del expresidente Abdalá Bucaram cuando le dijo al expresidente Rodrigo Boja que tenía el “esperma aguadito”, lo cual fue muy comentado en Ecuador en su momento y era una frase famosa entonces. Así que yo me referí al “mahuadito” por la destrucción del Sucre y Jamil Mahuad pidió mi expulsión del Ecuador, que fue anunciada por Guillermo Lasso en Guayaquil, donde me encontraba en ese momento.
Años más tarde me encontré de nuevo con Lasso en una conferencia en la Casa de América, donde también participaba Mario Vargas Llosa y muchas otras personalidades del mundo liberal iberoamericano, y le recordé cuando me expulsó del Ecuador siguiendo órdenes del “mahuadito”. Le dije que le perdonaba y que le apoyaba, que además esperaba que fuera presidente de su país. Hoy celebro que Lasso es presidente de Ecuador.
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