Llegó marzo y nuestro corazón revolucionario late con más fuerza por cumplirse un año más de un evento trascendental para los venezolanos: la siembra de nuestro gigante Hugo Rafael Chávez Frías, quien pasó a la inmortalidad el 5 de marzo del 2013 y sembró en cada uno de nosotros un enorme compromiso por el pueblo, por los valores humanos y socialistas que hoy defendemos con todo para honrar y proteger su legado.

Fue nuestro Chávez quien impulsó la Revolución como una nueva forma de hacer política, de construir, de atender, gestionar y solucionar, de avanzar y vencer, siempre fiel las ideas libertarias y de justicia social de nuestros próceres independentistas. Fue él quien nos trazó el camino creando políticas de protección social para defender la salud, la educación y el trabajo; los sectores y movimientos sociales.

También quien inculcó en el mundo la importancia de la unidad e integración de las naciones de América Latina y el Caribe; y quien nos habló tantas veces de la lealtad, la disciplina, el respeto y tantos otros valores que ahora más que nunca debemos practicar para garantizar el bienestar de nuestro pueblo, la recuperación y el desarrollo de nuestros estados, algo que solo lograremos con la continuidad de la Revolución Bolivariana dirigida por el presidente Nicolás Maduro. Vamos a hacerlo. Prohibido fallar.

Con ese corazón tricolor estamos alcanzando grandes objetivos. Cada semana sumamos victorias para los venezolanos y en especial para los neoespartanos, con quienes trabajamos de la mano por el bienestar de todos, por un estado modelo.

Producto de los esfuerzos del Presidente y de las gestiones que se vienen realizando en la entidad para estabilizar y mejorar la distribución de combustible eliminamos la restricción del número de placa para surtir. Además, se aprobó la ampliación de las compras libres de impuestos hasta por 3.000 veces el cambio oficial. Esto reactivará y dinamizará el turismo y comercio generando empleos y mejorando el ingreso de nuestro pueblo. Vamos por más. ¡Nueva Esparta Vamos Pa´ lante! Un abrazo.

Dante Rivas