Desde la antigüedad el corazón ha tenido un doble significado: como órgano y como “centro del alma” el cual ha sido fuente de inspiración en el arte y en este sentido es un símbolo universal de inmortalidad. La palabra “kurd” del sánscrito, lengua indoeuropea desde el siglo XV a. C. tenía ya un doble significado como órgano y como centro de emociones. De esta palabra kurd deriva cardia del griego y posteriormente cor en latín, que llega hasta nuestros días como corazón en español, heart en inglés, herz en alemán, coeur en francés, coração en portugués y cuore en italiano.
En la historia de la humanidad, la parte del cuerpo humano que más ha motivado poemas, canciones, pinturas, esculturas y otras expresiones artísticas es el corazón. En otras palabras este órgano ha sido visto desde el punto de vista morfológico y funcional por el científico y con la óptica de la imaginación subjetiva y creativa por el artista.
En el mes de septiembre, específicamente el martes 29, se celebrará el Día Mundial del Corazón. Esta es una iniciativa que la promovió la Federación Mundial del Corazón, la cual agrupa todas las sociedades científicas nacionales de cardiología en representación de los cardiólogos del mundo por países y a las fundaciones del corazón como organizaciones no gubernamentales, en representación de la sociedad civil organizada.
Los objetivos fundamentales de la celebración del Día Mundial del Corazón, son informar a la población general sobre las enfermedades cardiovasculares como problema de salud pública por su alta mortalidad y morbilidad, lo cual genera una gran demanda de atención médica con un alto impacto financiero, Además de llamar la atención sobre estos aspectos, la otra línea de información es la posibilidad de prevenir este grupo de enfermedades, lo cual mientras más temprano se haga y más extenso sea el objetivo, tendrá más impacto positivo.
En esta importante iniciativa se incorporan en escala universal, la Organización Mundial de la Salud y la Unesco; en escala nacional participan los Ministerios de la Salud de cada país, las Sociedades de Cardiología y las Fundaciones nacionales del Corazón y en escala local tienen un rol activo las organizaciones no gubernamentales, dedicadas a la prevención de las enfermedades cardiovasculares.
El lema general de esta actividad es un corazón para vida, pero cada año se selecciona un tópico más específico como por ejemplo la mujer y la salud cardiovascular, los niños y adolescentes, la nutrición, actividad física y obesidad, ambiente y salud cardiovascular y cálculo de riesgo cardiovascular con el fin de promocionar conductas de prevención de las enfermedades cardiovasculares.
El perfil epidemiológico cardiovascular en Venezuela, es complejo, porque en forma simultánea hay que enfrentar patologías de tipo crónico degenerativas, como por ejemplo las que tienen como substrato básico la aterosclerosis o la Hipertensión arterial con sus consecuencias sobre el corazón, riñón y cerebro; la enfermedad de Chagas que aún continúa afectando algunas zonas del país; las enfermedades congénitas del corazón cuyo impacto es alto sobre todo en niños y algunas epidemias que ha habido en las últimas décadas como Dengue, Zika o Chikungunya que pueden afectar al corazón y en forma más reciente la actual pandemia de Covid-19 que también repercute en el sistema cardiovascular.
En este Día Mundial del Corazón, debe abrirse un proceso de reflexión colectiva orientada a estimular alianzas interinstitucionales que generen programas cardiovasculares de alcance universal. El lema 2020 es Ponle corazón para estar sano.
ascardio.coordinacion@gmail.com
En la historia de la humanidad, la parte del cuerpo humano que más ha motivado poemas, canciones, pinturas, esculturas y otras expresiones artísticas es el corazón. En otras palabras este órgano ha sido visto desde el punto de vista morfológico y funcional por el científico y con la óptica de la imaginación subjetiva y creativa por el artista.
En el mes de septiembre, específicamente el martes 29, se celebrará el Día Mundial del Corazón. Esta es una iniciativa que la promovió la Federación Mundial del Corazón, la cual agrupa todas las sociedades científicas nacionales de cardiología en representación de los cardiólogos del mundo por países y a las fundaciones del corazón como organizaciones no gubernamentales, en representación de la sociedad civil organizada.
Los objetivos fundamentales de la celebración del Día Mundial del Corazón, son informar a la población general sobre las enfermedades cardiovasculares como problema de salud pública por su alta mortalidad y morbilidad, lo cual genera una gran demanda de atención médica con un alto impacto financiero, Además de llamar la atención sobre estos aspectos, la otra línea de información es la posibilidad de prevenir este grupo de enfermedades, lo cual mientras más temprano se haga y más extenso sea el objetivo, tendrá más impacto positivo.
En esta importante iniciativa se incorporan en escala universal, la Organización Mundial de la Salud y la Unesco; en escala nacional participan los Ministerios de la Salud de cada país, las Sociedades de Cardiología y las Fundaciones nacionales del Corazón y en escala local tienen un rol activo las organizaciones no gubernamentales, dedicadas a la prevención de las enfermedades cardiovasculares.
El lema general de esta actividad es un corazón para vida, pero cada año se selecciona un tópico más específico como por ejemplo la mujer y la salud cardiovascular, los niños y adolescentes, la nutrición, actividad física y obesidad, ambiente y salud cardiovascular y cálculo de riesgo cardiovascular con el fin de promocionar conductas de prevención de las enfermedades cardiovasculares.
El perfil epidemiológico cardiovascular en Venezuela, es complejo, porque en forma simultánea hay que enfrentar patologías de tipo crónico degenerativas, como por ejemplo las que tienen como substrato básico la aterosclerosis o la Hipertensión arterial con sus consecuencias sobre el corazón, riñón y cerebro; la enfermedad de Chagas que aún continúa afectando algunas zonas del país; las enfermedades congénitas del corazón cuyo impacto es alto sobre todo en niños y algunas epidemias que ha habido en las últimas décadas como Dengue, Zika o Chikungunya que pueden afectar al corazón y en forma más reciente la actual pandemia de Covid-19 que también repercute en el sistema cardiovascular.
En este Día Mundial del Corazón, debe abrirse un proceso de reflexión colectiva orientada a estimular alianzas interinstitucionales que generen programas cardiovasculares de alcance universal. El lema 2020 es Ponle corazón para estar sano.
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