Una mirada al pueblo
Aunque el oficialismo incumpla con la Constitución, la oposición nunca puede justificar incumplirla como lo ha venido haciendo y además victimizándose mientras algunos compañeros padecen en prisión...
Por un lado el grupo oficialista en el poder aspira que cuando gane la mayoría en la AN a finales de diciembre del presente año, podrá cambiar las leyes que necesita para poder privatizar y traer inversiones en las centenares de empresas del Estado. Y por otro lado, el grupo opositor piensa que cuando ellos lleguen al poder las inversiones van a venir como caudal torrencial. Mientras tanto los ciudadanos venezolanos padecemos de la guerra de “titanes” que tomaron a la nación venezolana como rehén para saciar sus ambiciones personales.
La realidad es que a los ciudadanos venezolanos no les beneficia esta batalla entre el chavismo y la oposición, sino lo contrario. Se benefician las partes enfrentadas de usar al recursos del estado como botín personal de guerra para dirimir conflictos que solo existen en sus cerebros. El resto de los venezolanos sufrimos las consecuencias tanto de la desviación de fondos como de las sanciones que generan estos conflictos al llevarse a escala internacional y la consecuencia es la continua merma en la producción. Si los padres de una familia ante un divorcio comienzan a demandar y congelar bienes entre sí, los que sufren son los hijos que no les queda ni paz para estudiar ni desarrollar sus actividades. Igual sucede sucede en un país o en las empresas privadas donde los socios o los funcionarios se pelean, por lo general se pierde contacto con el mercado y la necesidad de los clientes y por lo tanto la organización se viene a pique.
Hago estos señalamientos tan obvios para que los líderes de la oposición y del oficialismo tengan claro que sus batallas no son épicas. No le hacen ningún favor a nadie con sus batallas y tampoco están luchando por el bienestar del pueblo. El oficialismo y la oposición están apertrechados para sus batallas usando el tesoro público de ambos lados, imanados por el poder de lado y lado le está causando gravísimos daños a la sociedad. Al no dirimir ideas políticamente, puerta en puerta con el pueblo, al no crear conciencia, al no suscribir sus acciones a lo pautado en la Constitución Nacional, al llevar sus ansias de poder al terreno belicista y geopolítico no solo lo económico se hunde, sino además arrasa con la vida de 30 millones de personas. Las declaraciones destempladas y ofensivas entre militantes de partidos políticos enfrentados y financiadas por el mismo patrimonio nacional son realmente indignas de un pueblo. Aunque muchos ciudadanos cometan el error de hacerse parte de esas diatribas creyendo que de ellas sale un ganador. Si las luchas no son dentro de la Constitución Nacional nadie es ganador. Si el oficialismo o la oposición buscan salidas fuera de la Constitución la nación pierde irremediablemente. El mayor activo y único activo que poseen las naciones y los pueblos es tener unas reglas de juego, esto es una Constitución aprobada con el voto universal, secreto y por una mayoría.
Estoy seguro que así como los dirigentes del oficialismo hicieron el cambio en la políticas económicas hacia la apertura del mercado, también harán los cambios necesarios para encausar sus energías hacia los caminos constitucionales. Creo que para que el oficialismo cambie, la oposición debe dejar de actuar buscando revanchas y fuera de la Constitución. No debe buscar la Salida, no debió desaprovechar su mayoría en la AN para hacer propuestas a los temas de interés nacional , debates e interpelaciones respetuosas, no debió buscar la intervención militar de otros países o sanciones sino mejores controles. Dos errores no hacen un correcto. Así aunque el oficialismo incumpla con la Constitución, la oposición nunca puede justificar incumplirla como lo ha venido haciendo y además victimizándose mientras algunos compañeros padecen en prisión. De la polarización nunca gana el país y menos si la financia.
La realidad es que a los ciudadanos venezolanos no les beneficia esta batalla entre el chavismo y la oposición, sino lo contrario. Se benefician las partes enfrentadas de usar al recursos del estado como botín personal de guerra para dirimir conflictos que solo existen en sus cerebros. El resto de los venezolanos sufrimos las consecuencias tanto de la desviación de fondos como de las sanciones que generan estos conflictos al llevarse a escala internacional y la consecuencia es la continua merma en la producción. Si los padres de una familia ante un divorcio comienzan a demandar y congelar bienes entre sí, los que sufren son los hijos que no les queda ni paz para estudiar ni desarrollar sus actividades. Igual sucede sucede en un país o en las empresas privadas donde los socios o los funcionarios se pelean, por lo general se pierde contacto con el mercado y la necesidad de los clientes y por lo tanto la organización se viene a pique.
Hago estos señalamientos tan obvios para que los líderes de la oposición y del oficialismo tengan claro que sus batallas no son épicas. No le hacen ningún favor a nadie con sus batallas y tampoco están luchando por el bienestar del pueblo. El oficialismo y la oposición están apertrechados para sus batallas usando el tesoro público de ambos lados, imanados por el poder de lado y lado le está causando gravísimos daños a la sociedad. Al no dirimir ideas políticamente, puerta en puerta con el pueblo, al no crear conciencia, al no suscribir sus acciones a lo pautado en la Constitución Nacional, al llevar sus ansias de poder al terreno belicista y geopolítico no solo lo económico se hunde, sino además arrasa con la vida de 30 millones de personas. Las declaraciones destempladas y ofensivas entre militantes de partidos políticos enfrentados y financiadas por el mismo patrimonio nacional son realmente indignas de un pueblo. Aunque muchos ciudadanos cometan el error de hacerse parte de esas diatribas creyendo que de ellas sale un ganador. Si las luchas no son dentro de la Constitución Nacional nadie es ganador. Si el oficialismo o la oposición buscan salidas fuera de la Constitución la nación pierde irremediablemente. El mayor activo y único activo que poseen las naciones y los pueblos es tener unas reglas de juego, esto es una Constitución aprobada con el voto universal, secreto y por una mayoría.
Estoy seguro que así como los dirigentes del oficialismo hicieron el cambio en la políticas económicas hacia la apertura del mercado, también harán los cambios necesarios para encausar sus energías hacia los caminos constitucionales. Creo que para que el oficialismo cambie, la oposición debe dejar de actuar buscando revanchas y fuera de la Constitución. No debe buscar la Salida, no debió desaprovechar su mayoría en la AN para hacer propuestas a los temas de interés nacional , debates e interpelaciones respetuosas, no debió buscar la intervención militar de otros países o sanciones sino mejores controles. Dos errores no hacen un correcto. Así aunque el oficialismo incumpla con la Constitución, la oposición nunca puede justificar incumplirla como lo ha venido haciendo y además victimizándose mientras algunos compañeros padecen en prisión. De la polarización nunca gana el país y menos si la financia.
@alejandrojsucre
Siguenos en
Telegram,
Instagram,
Facebook y
Twitter
para recibir en directo todas nuestras actualizaciones