Definitivamente, tras varias semanas de reflexiones, se impuso el pragmatismo en el Ejecutivo Nacional y se decidió por medidas que al principio no lucen bien, pero que a la larga serán beneficiosas para el país.

En este sentido, considero que son positivas las medidas anunciadas por el presidente Nicolás Maduro, sobre la venta de gasolina y la apertura limitada de sectores económicos a las actividades del país, aunque ésta última resultó incompleta.

El pragmatismo se impuso en el Ejecutivo, representado por el ministro del Petróleo Tareck El Alssami, uniendo a sectores tradicionales pero experimentados, como el caso de Asdrúbal Chávez.

Este es un paso de avance para la productividad del país, es la incorporación del sector privado en la venta de gasolina con 200 estaciones, a precios internacionales.

La misma, conlleva más y mejores servicios, con pagos efectivos, con tarjetas, petro o moneda extranjera y horarios de 6 am hasta 12 pm, sin límites, lo que permitirá mejor atención a la población y la apertura en la venta de gasolina de la industria petrolera al sector privado.

Esta iniciativa debería continuar con todas las estaciones de servicio del país más adelante y extenderse con la participación privada en la extracción, producción, comercialización y demás áreas de la industria petrolera.

Sobre la apertura económica de los sectores, no se incluyeron los Centros Comerciales que podían funcionar con horarios especiales hasta la noche, las líneas aéreas con definición de programación de vuelos desde ya y medidas especiales en aeropuertos y los vuelos manteniendo la distancia, desinfección y pruebas al pasajero.

Tampoco se incluyeron los restaurants y comercios de consumo de comida, que tienen espacios para funcionar con la distancia debida, todas las áreas del turismo desde hoteles y posadas hasta centros de diversión y parques que pudieran contribuir a la restitución del empleo nacional.

También faltarían otros sectores de la vida nacional como las librerías, tiendas por departamentos, lavanderías, centros de telecomunicaciones con sus ventas, repuestos y técnicos, la venta de bebidas que es una industria nacional para materias primas como el alcohol, azúcar, el ron, entre otros.

Aquí de lo que se trata, es de restituirle el ingreso al venezolano, preservarle su empleo, que es tan importante para él cómo cuidar su salud, que planificadamente y cuidando las normas sanitarias, se podía haber implementado de una vez en tres turnos diarios, porque estamos desperdiciando las tardes-noches.

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