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Derechos Humanos: Ancianos(as) dignos

Esta protección de los ancianos(as) es obligación de los componentes sociales y del estado mencionados, para respetar su dignidad humana

  • CARLOS SAINZ MUÑOZ

25/05/2020 05:00 am

En esta oportunidad hemos querido ratificar el tema de la solidaridad que el componente de la institución mas antigua y base de la sociedad como es la familia y sus integrantes: los padres, madres, hijos, abuelos, nietos, todos una vez al año son expresión de ratificar el cariño, respeto y solidaridad que los une y nuestro tema es unir a los ancianos y ancianas también denominados “los adultos mayores” y sus derechos humanos a los que tienen derecho, no solo es obligación del Estado, la sociedad,  pero especialmente la familia.

Hemos querido destacar la obligación del trabajo y la seguridad social como el más social de los derechos para proteger en el ámbito individual y colectivos a los ancianos(as) que formaron parte de la clase trabajadora y esta no puede olvidar y defenderlos con normas de orden público social, en el proceso del trabajo. Hemos querido destacar en este modesto artículo una condición inexorable del transcurso del tiempo para todo ser humano como es llegar a la ancianidad, ellos tienen y merecen la mayor jerarquía, respeto, dignidad y legitimidad de origen con carácter de DDHH y Constitucionales de fuerte vinculación solidaria y protección y de allí que el estado tiene la obligación con los ancianos y ancianas garantizarle el pleno ejercicio de sus derechos e igualmente es una obligación conjunta y solidaria de la familia, hijos (as) y la sociedad.

Esta protección de los ancianos (as) es obligación de los componentes sociales y del estado mencionados para respetar su dignidad humana que merecen como DDHH su autonomía, y su cuidado integral a su salud, atención medica, medicinas y dotarlos de una pensión o jubilación digna a cargo de la Seguridad Social con bono de alimentación y medicinas que les permitan disfrutar una vejez con calidad de vida digna y decorosa.

Los ancianos merecen el amor, solidaridad, cuidado, mantenerlos, protegerlos, pero es lamentable que algunos hijos (as) los abandonan a su suerte y a la indigencia o en casas para su atención y los olvidan injustamente. Es justo reconocer a esos héroes anónimos personal médico, sanitario, cuidadores, religiosas, gerontólogos que con solidaridad integrales de los ancianos en las residencias velan por su protección durante esta pandemonium del virus mundial.

La Constitución humanista vigente obliga a hijos (as) asistir proteger, cuidar con amor a sus padres o madres cuando estos no puedan hacerlo por sí mismos, la ley establece los medios y medidas para su protección a los ancianos (as) su dignidad y sobre todo solidaridad y amor y no abandonarlos. Sería un acto injusto para quienes fueron a su vez solidarios con su familia. Solo acordarse de ellos en el día de la madre o el padre no es suficiente, hay que pagarle la deuda humana de cariño, respeto y amor. La sociedad se mide es por la protección a los ancianos(as). Honrémoslos se lo merecen. En especial a los médicos gerontólogos, enfermeras voluntarios y a los cuerpos de seguridad y militares, y todos los que fueron y son solidarios con cariño aprecio por los ancianos (as) son verdaderos héroes.

@laborasainz
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