Parte de las sensaciones que los ciudadanos perciben, es que por encontrarse cumpliendo la cuarentena debido al Covid-19, sus niveles de vulnerabilidad disminuyen. Y es comprensible al pasar la mayor parte de su tiempo en casa que es el lugar donde la seguridad se debería hacer más evidente. Esa sensación puede extenderse a las oportunidades que por alguna razón debemos movilizarnos para cubrir requerimientos indispensables. Por supuesto que ese efecto va atado a la conciencia plena de qué hábitos de prevención se están implementando. Pero, estar siempre en nuestro hogar y minimizar los traslados no es sinónimo de protección. Las amenazas aún en estas condiciones han demostrado una vez más su altísima capacidad de mutación para mantener sus actividades. De allí que se haga necesario en las actuales condiciones identificar esas particulares oportunidades que pueden ser fuente de impactos a nuestra integridad física o mental.

Internet ha pasado a ser un espacio al que se han volcado millones de personas, donde permanecen durante lapsos de tiempo nunca vistos. La necesidad de comunicación, información o de esparcimiento son las tres principales razones. Los cibercriminales tienen a su disposición unas condiciones favorables como muy pocas veces. En diversos países se han incrementado la variedad de actividades con fines ilícitos, tales como sustituciones de identidad, pedofilia, estafas, extorsiones, venta de productos falsificados, hurto de datos, malware, pharming, phishing, ransomware y virus informáticos. Las medidas de prevención, aunque sencillas muchas veces dejan de implementarse, se desactualizan o desactivan y es allí cuando el delincuente tiene plena oportunidad. Si recibe una oferta de bienes o servicios con precios excepcionalmente bajos preste especial atención y no se deje llevar por la primera impresión. Verifique telefónicamente y converse con aquel amigo o familiar que le plantea mediante redes sociales alguna transacción financiera o comercial. Las empresas internacionales de televisión como Directv, Netflix o Disney Channel tienen páginas web plenamente identificadas por donde realizar las suscripciones. No caiga en las falsas ofertas de equipos con “coberturas ampliadas” o “planes especiales”. Hasta un 70% de los medicamentos que se ofrecen por Internet, son productos falsificados o adulterados, por lo que debe optar por proveedores conocidos o recomendados por alguien de su confianza. El hecho de ofrecer servicios de transporte hasta su casa es un atractivo que incorporan los delincuentes como fachada de calidad y formalidad.

En las colas por combustible puede ser víctima de robos o hurtos. A altas horas de la noche, evite el uso del teléfono celular u otro equipo que por su iluminación es fácilmente detectable a lo lejos. Porte solamente el dinero necesario para la compra que vaya a realizar. No se haga acompañar de personas de la tercera edad, con dolencias de salud ni niños pequeños. Durante el día si va a permanecer fuera del vehículo ciérrelo y no deje a la vista ningún objeto. Las conversaciones pueden hacer más llevaderas las esperas, pero no comparta información personal con desconocidos. Es preferible no ceder a la tentación de comprar combustible en recipientes a particulares. No sólo se expone al riesgo de incendio por mal manejo o almacenaje, sino que desconoce la calidad real de lo que está pagando.

En las residencias se tiende a ser más flexible con la prevención en especial cuando se pasa allí largos períodos de tiempo. A toda hora mantenga cerrada con llave las rejas o puertas de su hogar. En las noches verifique el seguro de las ventanas independientemente del piso en el que se encuentre. No apague todas las luminarias en especial las que abarcan pasillos, ventanas, puertas, portones y perímetros. De ser posible, estacione su vehículo lo más cercano a paredes, columnas u otros vehículos de manera que se dificulte el hurto de combustible. Mantener limpia la carrocería es señal de que no se trata de un vehículo abandonado. Hay quienes utilizan uniformes y carné idénticos a los originales de empresas tales como alimentos, electricidad, gas, telefonía o televisión por cable. Con ello se les facilita el ingreso a los domicilios para realizar sus delitos. Si usted no ha realizado una compra, solicitado un servicio o no presenta averías, no acepte que entren a su hogar.

Si necesita salir de su casa, recuerde que ya en horas a final de la tarde disminuye la presencia de personas en la calle, hasta que en las noches el tránsito es casi inexistente. Mantenga en casa, aquellos artículos que pudiera necesitar ante una emergencia, tales como los medicamentos básicos y los de uso general para niños y adultos. Le permitirán hacer espera hasta el otro día y evitar salir de compras en la madrugada.

Recuerde que, aunque usted pueda sentirse seguro, lo importante es estar realmente protegido. Eso es posible cuando usted forma parte activa y no delega las acciones posibles en terceros.

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