Aunque Venezuela está entre los 10 países más ricos en recursos naturales comercializable, las disputas internas, infantiles y políticas impiden el desarrollo. Muchos líderes políticos como niños prefieren creerse sus propias fantasías que permitir políticas y leyes claras para fomentar la inmensa inversión necesaria para desarrollar nuestros recursos naturales y el empleo para el beneficio de toda la sociedad. Esta plaga en el pensamiento político también afecta a algunas naciones africanas y árabes donde sus líderes creen que el mundo desarrollado los quiere explotar.
Sin embargo, la fuerte concentración de recursos naturales mineros, agrícolas y energéticos en pocos países del tercer mundo y la arrogancia de algunos líderes de esos países que impiden administrar esos recursos naturales comercializables en forma inteligente, ha hecho que los países mas desarrollados vayan buscando fuentes alternativas. Así pasó con el fracking y el petróleo. Así pasará con la minería y la agricultura. Ya EEUU produce cerca de 13 millones de barriles diarios de petróleo y es menos dependiente de Venezuela y del Medio Oriente.
Así como en petróleo ocurrió, en minería y en agricultura los países desarrollados también buscan alternativas para reducir la dependencia de los políticos infantiles que inventan batallas antiimperialistas e impiden que sus países se desarrollen armónicamente.
Según las reservas terrestres conocidas y el consumo cada vez mayor en los países desarrollados y en desarrollo, los elementos mineros clave necesarios para la industria moderna y la producción de alimentos podrían agotarse en la Tierra dentro de 50 a 60 años. Estos incluyen fósforo, antimonio, zinc, estaño, plomo, plata, oro y cobre. En respuesta, se ha sugerido que el platino, el cobalto y otros elementos valiosos de los asteroides pueden extraerse y enviarse a la Tierra con fines de lucro, utilizados para construir satélites de energía solar y hábitats espaciales, y el agua procesada del hielo para repostar los depósitos de propulsores en órbita. Los metales preciosos como el oro, la plata y los metales del grupo del platino podrían transportarse de regreso a la Tierra, mientras que los metales del grupo del hierro y otros comunes podrían usarse para la construcción en el espacio. Todavía hay dificultades que incluyen el alto costo de los vuelos espaciales, la identificación poco confiable de asteroides que son adecuados para la minería y los desafíos de extracción de minerales. Si la financiación del programa espacial, ya sea pública o privada, aumenta drásticamente, esta situación puede cambiar a medida que los recursos en la Tierra se vuelven cada vez más escasos o inaccesibles por problemas políticos.
En abril del 2012, empresarios multimillonarios anunciaron un plan para de los asteroides obtener sus recursos vía Planetary Resources. Los asesores incluyen al director y explorador cinematográfico James Cameron y los inversores incluyen al director ejecutivo de Google, Larry Page, y su presidente ejecutivo, Eric Schmidt. También planean crear un depósito de combustible en el espacio para 2020 mediante el uso de agua de asteroides, dividiéndolo en oxígeno líquido e hidrógeno líquido para combustible de cohetes.
También para la agricultura los cambios en la energías renovables en algunos años van a permitir la siembra de productos vegetales típicos del trópico en los países donde hoy los inviernos no lo permiten. Algunos líderes del tercer mundo y Venezuela en particular van a tener que cambiar su actitud, dejar de victimizarse ante el mundo desarrollado y comenzar un programa de fondo para atraer inversiones en sus industrias energéticas, mineras y agrícolas.
Twitter: @alejandrojsucre
Sin embargo, la fuerte concentración de recursos naturales mineros, agrícolas y energéticos en pocos países del tercer mundo y la arrogancia de algunos líderes de esos países que impiden administrar esos recursos naturales comercializables en forma inteligente, ha hecho que los países mas desarrollados vayan buscando fuentes alternativas. Así pasó con el fracking y el petróleo. Así pasará con la minería y la agricultura. Ya EEUU produce cerca de 13 millones de barriles diarios de petróleo y es menos dependiente de Venezuela y del Medio Oriente.
Así como en petróleo ocurrió, en minería y en agricultura los países desarrollados también buscan alternativas para reducir la dependencia de los políticos infantiles que inventan batallas antiimperialistas e impiden que sus países se desarrollen armónicamente.
Según las reservas terrestres conocidas y el consumo cada vez mayor en los países desarrollados y en desarrollo, los elementos mineros clave necesarios para la industria moderna y la producción de alimentos podrían agotarse en la Tierra dentro de 50 a 60 años. Estos incluyen fósforo, antimonio, zinc, estaño, plomo, plata, oro y cobre. En respuesta, se ha sugerido que el platino, el cobalto y otros elementos valiosos de los asteroides pueden extraerse y enviarse a la Tierra con fines de lucro, utilizados para construir satélites de energía solar y hábitats espaciales, y el agua procesada del hielo para repostar los depósitos de propulsores en órbita. Los metales preciosos como el oro, la plata y los metales del grupo del platino podrían transportarse de regreso a la Tierra, mientras que los metales del grupo del hierro y otros comunes podrían usarse para la construcción en el espacio. Todavía hay dificultades que incluyen el alto costo de los vuelos espaciales, la identificación poco confiable de asteroides que son adecuados para la minería y los desafíos de extracción de minerales. Si la financiación del programa espacial, ya sea pública o privada, aumenta drásticamente, esta situación puede cambiar a medida que los recursos en la Tierra se vuelven cada vez más escasos o inaccesibles por problemas políticos.
En abril del 2012, empresarios multimillonarios anunciaron un plan para de los asteroides obtener sus recursos vía Planetary Resources. Los asesores incluyen al director y explorador cinematográfico James Cameron y los inversores incluyen al director ejecutivo de Google, Larry Page, y su presidente ejecutivo, Eric Schmidt. También planean crear un depósito de combustible en el espacio para 2020 mediante el uso de agua de asteroides, dividiéndolo en oxígeno líquido e hidrógeno líquido para combustible de cohetes.
También para la agricultura los cambios en la energías renovables en algunos años van a permitir la siembra de productos vegetales típicos del trópico en los países donde hoy los inviernos no lo permiten. Algunos líderes del tercer mundo y Venezuela en particular van a tener que cambiar su actitud, dejar de victimizarse ante el mundo desarrollado y comenzar un programa de fondo para atraer inversiones en sus industrias energéticas, mineras y agrícolas.
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