Espacio publicitario

Nasserismo-Peronismo “por la región”

Argentina, a diferencia de Egipto, era y sigue siendo hoy un país bendecido por una gran geografía para producir suficientes bienes de servicios, industrias agricultura y ganadería

  • MIGUEL BAHACHILLE

11/11/2019 05:00 am

El ensayo intentado por Gamal Abdel Nasser, presidente de Egipto entre 1954-1970, de militarizar las instituciones para hacerlas “más eficientes”, fue el fiasco histórico más estrepitoso sufrido por esa nación. La distorsión fue de tal magnitud que en todo Egipto se repetía con rubor: “el ejército es la única fuerza política del país”. Nasser, de origen humilde, luego de concluir sus estudios en secundaria, ingresa en la Real Academia Militar de la cual egresa en 1938. En sus años de servicio hizo amistad con varios oficiales con los fundó una sociedad revolucionaria secreta llamada “Los oficiales Libres”. Éstos dan un golpe de Estado en 1952 y en 1953 se proclama una República de Partido único. En 1954 Nasser asume el poder como primer ministro para luego elegirse presidente en 1956.

Su populismo
En 1962 presentó ante “El Congreso Nacional de las Fuerzas Populares” un largo documento que denominó “Carta de Acción Nacional” (una Constituyente) en la que matiza los conflictos del país que serían resueltos configurando una especie de alianza con la clase obrera la cual ocuparía la mitad de los cargos de administración pública. En su confusión ideológica propuso conducir a Egipto hacia una sociedad más justa que reflejara las experiencias chinas y soviéticas contra “el cruel capitalismo”.

Garabato ideológico
La mezcolanza conceptual que significaba para Nasser tener control sobre un ejército de 500.000 hombres, aunada a la idea socialista de partido único, derrumbó la precaria estructura de Estado lograda con grandes sacrificios de la población para liberar a Egipto del dominio inglés. Creyó que sus oficiales, estudiantes con 3 años de servicio militar obligatorio, beduinos asimilados más por hambre que por convicción, coroneles y generales que se creían otros “Nassers”, podrían sostener “la revolución egipcia”. Todo el mundo conoce el epílogo de ese amasijo socio-militar evidenciado en “La guerra de los seis días” contra Israel. El ejército se desmoronó a la par de “su pueblo revolucionario”.

Peronismo= nasserismo regional
Juan Domingo Perón, electo presidente de Argentina, que asume el poder en 1943 ataviado con uniforme militar luciendo todas sus insignias, instó a la mayoría parlamentaria para que le devuelvan el rango soldadesco que le correspondería ahora como presidente de la nación. Esa nueva simbología castrense daba inicio a un prototipo militarista que luego se extendería por América Latina. Prometió instituir “la justicia social y reconciliación nacional” encumbrando otro invento personalista: “El justicialismo”.

Hoy
Argentina, a diferencia de Egipto, era y sigue siendo hoy un país bendecido por una gran geografía para producir suficientes bienes de servicios, industrias agricultura y ganadería, con capacidad de abastecer de alimentos no sólo a su población de 44 millones sino a 440 millones de personas (10 veces más). La fiebre peronista, también brotada en otros países de América latina, ha sacudido sobre todo al más necesitado que entumecido por el populismo se empobrece aún más.

Cristina Kirchner, Nicolás Maduro, Evo Morales, Daniel Ortega, Andrés Manuel López, peronistas, siguen contagiados por el populismo que busca aplausos mientras la pobreza sacude a los pueblos “que representan”.

El populista se esmera
Populismo es lo mismo que demagogia. Su primera tarea es denigrar de la tradicional estructura de Estado para imponer la suya propia. ¡Fuera la organicidad institucional! para el manejo del presupuesto y/o toda acción administrativa o social como por ejemplo el Sistema Educativo.

“Los oficiales Libres” de Nasser, “El Justicialismo de Perón”, “El MBR-200 de Chávez”, se inscriben en una ralea petulante a ojos vistas fracasada. El epilogo del ataque contra el capitalismo, como parte de un libreto vanidoso de líderes perturbados por su ego enfermizo, está a la vista: pobreza, escasez e inseguridad.

miguelbmer@gmail.com
@MiguelBM29
Siguenos en Telegram, Instagram, Facebook y Twitter para recibir en directo todas nuestras actualizaciones
-

Espacio publicitario

Espacio publicitario

Espacio publicitario

DESDE TWITTER

EDICIÓN DEL DÍA

Espacio publicitario

Espacio publicitario