Ambiente y ecopolítica
Los movimientos ecológicos se proclaman defensores del ambiente y de una mejor calidad de vida, encarnan valores post materialistas. Rechazan la visión economicista del liberalismo y del socialismo con el compromiso de la democracia y los Derechos Humanos
Los movimientos sociales ambientalistas cada vez son más importantes en todo el mundo, por las consecuencias del cambio climático y la incidencia directa en la vida del hombre, de los animales y las plantas. El pasado 18 de septiembre el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, señalo que ha llegado el momento para un plan mundial, para salvar los objetivos del desarrollo sostenible (ODS). En este foro especial de la ONU, los líderes mundiales aprobaron una declaración política para que estos 17 ODS sean llevados a la práctica, estos principios fueron adoptados en el 2015 dentro del imperativo de un desarrollo sostenible y sustentable. Fue firme para el Mundo Diplomático, que cada año se reúne en New York, en la sede de la ONU, el demostrar la necesidad de acciones políticas en este campo, para que los gobiernos cumplan sus compromisos en el campo del Derecho de las relaciones Internacionales, en esta materia. La Eco política estuvo presente en los diferentes mensajes de los jefes de estados y jefes de gobierno.
Para Gobarchov en su “Manifiesto por la Tierra”, hoy el ser humano no puede sustraerse a tres desafíos del siglo XXI. El primero es la necesidad de mantener la paz mundial regional y nacional, especialmente por aquellos Estados que poseen el arma nuclear. Debe ponerse fin a los conflictos locales que cada vez se internacionalizan más y confrontar unidos la lucha contra el terrorismo que no tiene ninguna justificación política o moral. El segundo desafío tiene que ver con la lucha contra la pobreza en todo el mundo, la mitad de la población del planeta vive en miseria, sufriendo de hambre y escasez de agua potable. El tercer desafío toca a los problemas del ambiente, los cambios climáticos que hoy afectan al mundo son evidentes, los cataclismos naturales son constantes, especies animales y vegetales desaparecen y los grandes glaciales se derriten, mares y océanos cada vez están más contaminados y las selvas primarias se borran del mapa. Hemos entado en conflicto con la vida, es decir con la naturaleza.
Estos tres desafíos conciernen no solamente a los gobiernos de los diferentes países y a las Organizaciones Internacionales, sino a cada uno de nosotros y más allá de la ciencia y de la tecnología que aporta herramientas para la solución de estos problemas, es la política la que debe orientar el cambio con una nueva ideología y una nueva política ecológica, con un nuevo pensamiento para la humanidad, que permita una nueva cultura y una nueva civilización, donde puedan combinarse la inteligencia y el corazón en la unidad de la diversidad frente a las generaciones futuras y para salvar la vida.
Por lo que es importante construir y difundir la ecopolítica, como espacio ideológico y político en nuestro país, en América latina y el mundo. La ecopolítica será la fuerza transformadora del siglo XXI frente al fracaso de los modelos de desarrollo del capitalismo y el comunismo. Constituye un sistema de pensamiento global y autónomo a partir de las experiencias políticas de los verdes en los diferentes Estados y continentes, debemos construir un espacio común verde, no reductible a los sistemas políticos que hemos conocido. Debe tomarse lo mejor de los grandes sistemas, del liberalismo, los derechos humanos de la primera generación; del socialismo todos aquellos vinculados a los derechos económicos, sociales y culturales. Avanzar de la democracia representativa y participativa hacia una democracia del conocimiento y de la acción.
La Ideología Verde se inscribe en el pensamiento político de Noberto Bobbio en la búsqueda de la síntesis de lo imperativo, de la justicia y la libertad en la sociedad. Pero también en la dinámica de contractualismo de John Rawls.
El planteamiento político de los Verdes en Europa, es la afirmación de la democracia, más allá del capitalismo y del socialismo, dentro de un nuevo concepto de la responsabilidad. Es lo que algunos denominan democracia cognitiva, que sustituya a la democracia competitiva, delegativa o representativa para construir con la participación de los ciudadanos, las políticas que definan la vida.
Los partidos Verdes se iniciaron con la sensibilidad ecologista en los Estados Unidos, en los 60 años con la denuncia del crecimiento irracional del capitalismo, pero también en el mundo comunista por la desviación hacia el autoritarismo de los principios del socialismo. Pero fue en los Países Nórdicos y en Europa Occidental, donde la ecología se transformó en movimiento político. En 1980 se constituyó en Alemania Federal el partido de los Verdes “Grunen”, en 1987 obtuvieron 44 parlamentarios con el 8.3% de la votación. Posteriormente en todos los países fueron apareciendo movimientos políticos Verdes en Europa Occidental y Oriental. En Francia se aglutinaron en torno a la candidatura presencial de Rene Dumont en 1974 y Brice Lalonde en 1981. Fue en 1988 cuando distintos grupos ecologistas crearon la Confederación Verde del partido Ecologista con el eslogan “ni derecha ni izquierda”. En esa oportunidad el candidato presidencial Antoine Waecher obtuvo el 3.85 de los votos. En las elecciones del parlamento europeo de 1989 el partido Verde francés llego al 10.6%.
Los movimientos ecológicos se proclaman defensores del ambiente y de una mejor calidad de vida, encarnan valores post materialistas. Rechazan la visión economicista del liberalismo y del socialismo con el compromiso de la democracia y de los Derechos Humanos.
Jcpineda01@gmail.com
Para Gobarchov en su “Manifiesto por la Tierra”, hoy el ser humano no puede sustraerse a tres desafíos del siglo XXI. El primero es la necesidad de mantener la paz mundial regional y nacional, especialmente por aquellos Estados que poseen el arma nuclear. Debe ponerse fin a los conflictos locales que cada vez se internacionalizan más y confrontar unidos la lucha contra el terrorismo que no tiene ninguna justificación política o moral. El segundo desafío tiene que ver con la lucha contra la pobreza en todo el mundo, la mitad de la población del planeta vive en miseria, sufriendo de hambre y escasez de agua potable. El tercer desafío toca a los problemas del ambiente, los cambios climáticos que hoy afectan al mundo son evidentes, los cataclismos naturales son constantes, especies animales y vegetales desaparecen y los grandes glaciales se derriten, mares y océanos cada vez están más contaminados y las selvas primarias se borran del mapa. Hemos entado en conflicto con la vida, es decir con la naturaleza.
Estos tres desafíos conciernen no solamente a los gobiernos de los diferentes países y a las Organizaciones Internacionales, sino a cada uno de nosotros y más allá de la ciencia y de la tecnología que aporta herramientas para la solución de estos problemas, es la política la que debe orientar el cambio con una nueva ideología y una nueva política ecológica, con un nuevo pensamiento para la humanidad, que permita una nueva cultura y una nueva civilización, donde puedan combinarse la inteligencia y el corazón en la unidad de la diversidad frente a las generaciones futuras y para salvar la vida.
Por lo que es importante construir y difundir la ecopolítica, como espacio ideológico y político en nuestro país, en América latina y el mundo. La ecopolítica será la fuerza transformadora del siglo XXI frente al fracaso de los modelos de desarrollo del capitalismo y el comunismo. Constituye un sistema de pensamiento global y autónomo a partir de las experiencias políticas de los verdes en los diferentes Estados y continentes, debemos construir un espacio común verde, no reductible a los sistemas políticos que hemos conocido. Debe tomarse lo mejor de los grandes sistemas, del liberalismo, los derechos humanos de la primera generación; del socialismo todos aquellos vinculados a los derechos económicos, sociales y culturales. Avanzar de la democracia representativa y participativa hacia una democracia del conocimiento y de la acción.
La Ideología Verde se inscribe en el pensamiento político de Noberto Bobbio en la búsqueda de la síntesis de lo imperativo, de la justicia y la libertad en la sociedad. Pero también en la dinámica de contractualismo de John Rawls.
El planteamiento político de los Verdes en Europa, es la afirmación de la democracia, más allá del capitalismo y del socialismo, dentro de un nuevo concepto de la responsabilidad. Es lo que algunos denominan democracia cognitiva, que sustituya a la democracia competitiva, delegativa o representativa para construir con la participación de los ciudadanos, las políticas que definan la vida.
Los partidos Verdes se iniciaron con la sensibilidad ecologista en los Estados Unidos, en los 60 años con la denuncia del crecimiento irracional del capitalismo, pero también en el mundo comunista por la desviación hacia el autoritarismo de los principios del socialismo. Pero fue en los Países Nórdicos y en Europa Occidental, donde la ecología se transformó en movimiento político. En 1980 se constituyó en Alemania Federal el partido de los Verdes “Grunen”, en 1987 obtuvieron 44 parlamentarios con el 8.3% de la votación. Posteriormente en todos los países fueron apareciendo movimientos políticos Verdes en Europa Occidental y Oriental. En Francia se aglutinaron en torno a la candidatura presencial de Rene Dumont en 1974 y Brice Lalonde en 1981. Fue en 1988 cuando distintos grupos ecologistas crearon la Confederación Verde del partido Ecologista con el eslogan “ni derecha ni izquierda”. En esa oportunidad el candidato presidencial Antoine Waecher obtuvo el 3.85 de los votos. En las elecciones del parlamento europeo de 1989 el partido Verde francés llego al 10.6%.
Los movimientos ecológicos se proclaman defensores del ambiente y de una mejor calidad de vida, encarnan valores post materialistas. Rechazan la visión economicista del liberalismo y del socialismo con el compromiso de la democracia y de los Derechos Humanos.
Jcpineda01@gmail.com
Siguenos en
Telegram,
Instagram,
Facebook y
Twitter
para recibir en directo todas nuestras actualizaciones