Hay personajes que marcan el futuro de sucesivas generaciones, Marcel Roche fue uno de ellos. Afortunado aquel que lo conoció de distintas formas, en persona y como constructor de país. Roche fue médico, científico y ductor, gerente visionario y emprendedor; escritor, cronista y divulgador de ciencia; ávido lector, culto y políglota; amante del deleite y la aventura; clásico pero audaz, pragmático y humano. En fin, de esos líderes a los que se emula por una vida entera.
La ocasión viene por un homenaje del IVIC a los 20 años de la desaparición física del gran hombre. A cargo de una científica de excepción, Gioconda Cunto de San Blas, la tertulia juntó a distinguidos colegas como Hebe Vessuri, Miguel Laufer, Ignacio (Nacho) Avalos, y Yajaira Freites. La familia de Roche también estuvo allí, junto a un dúo de chelistas que con un breve concierto cerraron el evento con el instrumento favorito del homenajeado. De los exponentes surgieron varios Roche: cosmopolita y humanista, científico universal, divulgador, editor, meritocrático y vigente, un líder que “abrió la cancha” a todas las ciencias. Roche 5.0, dijo Nacho por ahí.
Roche y su obra impresionaron a quien escribe como el modelo a seguir desde recién graduado hasta el investigador ya formal. En forma sucesiva, deslumbró temprano por su obra pionera del IVIC y de aquél Conicit del siglo pasado, además de sus crónicas sobre la ciencia, y el tránsito de sus investigaciones desde la básica a la medicina tropical, y la sociología de la ciencia. En el libro sobre el bachiller Rangel, Roche redescubre su propio ethos como maestro visionario, universal y multifacético, de allí que concluyera que, Rangel c'est moi(1) En otro texto de Roche, está el origen del Intevep: ...para marzo 1971 [Conicit] estableció un comité encargado de planificar y eventualmente organizar un instituto de investigación en petróleo.(2) Hoy lo recordamos y seguimos a través de la decena de grandes discípulos que legó al país.
@rrangelaldao
1 Roche, M. (1978). Rafael Rangel: ciencia, política en la Venezuela de principios de siglo. Monteavila Editores.
2 Roche, M (Compilador), 1996. Perfil de la Ciencia en Venezuela, Tomo 2, pp174, Fundación Polar.
La ocasión viene por un homenaje del IVIC a los 20 años de la desaparición física del gran hombre. A cargo de una científica de excepción, Gioconda Cunto de San Blas, la tertulia juntó a distinguidos colegas como Hebe Vessuri, Miguel Laufer, Ignacio (Nacho) Avalos, y Yajaira Freites. La familia de Roche también estuvo allí, junto a un dúo de chelistas que con un breve concierto cerraron el evento con el instrumento favorito del homenajeado. De los exponentes surgieron varios Roche: cosmopolita y humanista, científico universal, divulgador, editor, meritocrático y vigente, un líder que “abrió la cancha” a todas las ciencias. Roche 5.0, dijo Nacho por ahí.
Roche y su obra impresionaron a quien escribe como el modelo a seguir desde recién graduado hasta el investigador ya formal. En forma sucesiva, deslumbró temprano por su obra pionera del IVIC y de aquél Conicit del siglo pasado, además de sus crónicas sobre la ciencia, y el tránsito de sus investigaciones desde la básica a la medicina tropical, y la sociología de la ciencia. En el libro sobre el bachiller Rangel, Roche redescubre su propio ethos como maestro visionario, universal y multifacético, de allí que concluyera que, Rangel c'est moi(1) En otro texto de Roche, está el origen del Intevep: ...para marzo 1971 [Conicit] estableció un comité encargado de planificar y eventualmente organizar un instituto de investigación en petróleo.(2) Hoy lo recordamos y seguimos a través de la decena de grandes discípulos que legó al país.
@rrangelaldao
1 Roche, M. (1978). Rafael Rangel: ciencia, política en la Venezuela de principios de siglo. Monteavila Editores.
2 Roche, M (Compilador), 1996. Perfil de la Ciencia en Venezuela, Tomo 2, pp174, Fundación Polar.
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