La ciencia continuamente abre nuevas puertas del conocimiento. Lo que antes parecía imposible, a veces se vuelve realidad luego. Los teléfonos, los aviones, los antibióticos, los satélites espaciales, las computadoras personales, los celulares, la Internet, todos parecían magia en su momento. Ahora, afortunadamente, cada uno de esos descubrimientos e invenciones son considerados normales por las nuevas generaciones.
Muchas ideas a veces avanzan de la ciencia ficción hacia la ciencia real. En el tema del envejecimiento, los científicos vienen alcanzado grandes logros en estudios de longevidad durante los últimos años y, de continuar así, es probable que se llegue al control del envejecimiento en las próximas dos décadas. Gracias a diferentes desarrollos científicos y tecnológicos, actualmente se han creado ratones aumentado casi 2 veces su expectativa de vida promedio, mosquitas de la fruta que viven 4 veces más, y algunos gusanos que han logrado vivir 10 veces más que su expectativa de vida observada normalmente en la naturaleza.
Los experimentos con ratones son especialmente importantes pues se estima que los ratones y lo seres humanos compartimos cerca del 90% del genoma. Hay una fundación sin fines de lucro que tiene un premio para crear ratones que vivan indefinidamente. La competencia científica internacional se llama el “Premio del Ratón Matusalén” (www.mprize.org) para crear ratones que alcancen vidas muy largas, con una longevidad creciente. También hay un segundo premio para “rejuvenecer” ratones. Los científicos que participan en el “Premio del Ratón Matusalén” esperan que en dos décadas se pueda controlar el proceso de envejecimiento en los ratones, y quizás una década más tarde se pueda hacer lo mismo en los humanos.
En pocas palabras, lo que hoy parece imposible, pronto quizás podrá ser posible. Los avances científicos recientes indican que la inmortalidad física es posible, y que muchos de nosotros llegaremos a verla con nuestros propios ojos.
www.cordeiro.org
Muchas ideas a veces avanzan de la ciencia ficción hacia la ciencia real. En el tema del envejecimiento, los científicos vienen alcanzado grandes logros en estudios de longevidad durante los últimos años y, de continuar así, es probable que se llegue al control del envejecimiento en las próximas dos décadas. Gracias a diferentes desarrollos científicos y tecnológicos, actualmente se han creado ratones aumentado casi 2 veces su expectativa de vida promedio, mosquitas de la fruta que viven 4 veces más, y algunos gusanos que han logrado vivir 10 veces más que su expectativa de vida observada normalmente en la naturaleza.
Los experimentos con ratones son especialmente importantes pues se estima que los ratones y lo seres humanos compartimos cerca del 90% del genoma. Hay una fundación sin fines de lucro que tiene un premio para crear ratones que vivan indefinidamente. La competencia científica internacional se llama el “Premio del Ratón Matusalén” (www.mprize.org) para crear ratones que alcancen vidas muy largas, con una longevidad creciente. También hay un segundo premio para “rejuvenecer” ratones. Los científicos que participan en el “Premio del Ratón Matusalén” esperan que en dos décadas se pueda controlar el proceso de envejecimiento en los ratones, y quizás una década más tarde se pueda hacer lo mismo en los humanos.
En pocas palabras, lo que hoy parece imposible, pronto quizás podrá ser posible. Los avances científicos recientes indican que la inmortalidad física es posible, y que muchos de nosotros llegaremos a verla con nuestros propios ojos.
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