Caracas.- Al concluir la semana comprendida entre los días 22 y 29 de octubre, los precios del petróleo del mar del norte, el intermedio de Texas y la cesta OPEP, se vieron perjudicados por importantes descensos en sus tasas.
Según datos extraídos de Datosmacro.com, el petróleo Brent, considerado en el continente europeo, evidenció la mayor variación negativa con una rebaja de 4,72 dólares por cada barril, cuando se desplazó de 41,28 a 36,56 dólares estadounidenses.
El segundo puesto lo ocupó el West Texas Intermediate (WTI), referente en Estados Unidos, que pasó de 40,46 a 35,94 dólares, obteniendo un déficit de 4,52 dólares por cada barril de crudo.
De igual modo, la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) obtuvo una rebaja de 3,79 dólares en el mismo período que el resto de los indicadores, al moverse desde los 40,91 a 37,12 dólares estadounidenses.
Pérdidas acumuladas
Repsol informó que, durante un período nueve meses, obtuvo 2.578 millones de euros en pérdidas acumuladas, resultado negativo generado por la contracción en las ventas y la caída en el precio del crudo por causa de la crisis sanitaria global.
“Entre enero y septiembre la cotización media del crudo Brent cayó un 36% y la del WTI un 33%, con precios medios cercanos a los 40 dólares por barril para ambos indicadores. Por su parte, el gas Henry Hub disminuyó su cotización media un 30%, arrojando un precio medio para el período de 1,9 dólares por millón de BTU”, explicó la compañía a través de un informe.
Expuso que, a pesar de las vicisitudes ocasionadas por la pandemia, Repsol priorizó la continuidad de su actividad sobre los habituales criterios de rentabilidad, “dado el carácter esencial que sus productos y servicios tienen para la sociedad y para que ésta pueda enfrentarse a la crisis”.
Los resultados señalan que 53% de las pérdidas (1.376 millones de euros) se debieron a posiciones patrimoniales que tiene Repsol en negocios en América Latina, donde su actividad se ha visto comprometida por medidas económicas y políticas.
“Los resultados específicos en nueves meses de 2020 corresponden a la provisión en el negocio de exploración y producción tras asumir un escenario de precios de crudo y gas menor, al efecto negativo del tipo de cambio en posiciones fiscales principalmente en Brasil y provisiones de riesgo de crédito en Venezuela”, complementó la multinacional energética y petroquímica española.
Según datos extraídos de Datosmacro.com, el petróleo Brent, considerado en el continente europeo, evidenció la mayor variación negativa con una rebaja de 4,72 dólares por cada barril, cuando se desplazó de 41,28 a 36,56 dólares estadounidenses.
El segundo puesto lo ocupó el West Texas Intermediate (WTI), referente en Estados Unidos, que pasó de 40,46 a 35,94 dólares, obteniendo un déficit de 4,52 dólares por cada barril de crudo.
De igual modo, la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) obtuvo una rebaja de 3,79 dólares en el mismo período que el resto de los indicadores, al moverse desde los 40,91 a 37,12 dólares estadounidenses.
Pérdidas acumuladas
Repsol informó que, durante un período nueve meses, obtuvo 2.578 millones de euros en pérdidas acumuladas, resultado negativo generado por la contracción en las ventas y la caída en el precio del crudo por causa de la crisis sanitaria global.
“Entre enero y septiembre la cotización media del crudo Brent cayó un 36% y la del WTI un 33%, con precios medios cercanos a los 40 dólares por barril para ambos indicadores. Por su parte, el gas Henry Hub disminuyó su cotización media un 30%, arrojando un precio medio para el período de 1,9 dólares por millón de BTU”, explicó la compañía a través de un informe.
Expuso que, a pesar de las vicisitudes ocasionadas por la pandemia, Repsol priorizó la continuidad de su actividad sobre los habituales criterios de rentabilidad, “dado el carácter esencial que sus productos y servicios tienen para la sociedad y para que ésta pueda enfrentarse a la crisis”.
Los resultados señalan que 53% de las pérdidas (1.376 millones de euros) se debieron a posiciones patrimoniales que tiene Repsol en negocios en América Latina, donde su actividad se ha visto comprometida por medidas económicas y políticas.
“Los resultados específicos en nueves meses de 2020 corresponden a la provisión en el negocio de exploración y producción tras asumir un escenario de precios de crudo y gas menor, al efecto negativo del tipo de cambio en posiciones fiscales principalmente en Brasil y provisiones de riesgo de crédito en Venezuela”, complementó la multinacional energética y petroquímica española.
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