Caracas.- El presidente de la Cámara Venezolana de Calzado y Componentes (Cavecal), Luigi Pisella, dijo que el 60% de los zapatos que se comercializan en el mercado nacional son importados.
Entretanto el 40% de la oferta local es de producción nacional, señaló el empresario al explicar que la fabricación de calzado en el país descendió en lo que va de año, debido a que el sector debe asumir el pago de importantes impuestos.
“Hay que hacer una revisión, porque el zapato importado está exento de arancel. En el 2018 teníamos aproximadamente el 80% del mercado, el cual descendió a un 50% en el mes de junio. Actualmente la producción está de un 60% importado, y un 40% nacional”.
Por tal razón, exhortó al Gobierno a que recauden tributos también por la vía de productos importados. “No estamos pidiendo no pagar impuestos, lo que estamos pidiendo es que ellos paguen impuestos, de esta manera el Estado también se beneficiaría”.
El líder gremial, además indicó que los zapatos importados son de baja calidad si se les compara con los elaborados en el país.
“No es justo porque si ellos pagaran impuestos el costo se acercaría a los de nosotros. Nosotros estamos asumiendo toda la carga impositiva, es decir, el pago de todos los impuestos de los fabricantes del país”.
En tal sentido, el presidente de Consecomercio, Felipe Capozzolo, dio su apoyo a la Cámara Venezolana del Calzado.
“La industria del calzado es tan importante en Venezuela que ha tenido tanta tradición desde los años 50 que ha sido levantada precisamente por manos inmigrantes y que ha dado tantas satisfacciones y ha aportado tanto al Producto Interno Bruto (PIB) de la nación en el desarrollo del país”.
Asimismo, reiteró que los “inmigrantes nuestros” son precisamente esos que se están yendo del país a otras latitudes, por lo que cree que difícilmente en el mundo de hoy van a tener las oportunidades que tuvieron los fundadores de las fábricas de calzados en el país.
“Tenemos la imperiosa necesidad de retener el talento humano, porque los necesitamos para labrar un futuro. Necesitamos correcciones a nivel económico que nos ayuden a buscar la senda de emprendimientos nuevamente”, refirió.
Pidió al mundo político que produzca un acuerdo, unas condiciones de paz y prosperidad duradera y que tengan una utilidad para la población venezolana, pues el petróleo es una imposibilidad para la economía del país en materia financiera.
“Con la pequeña cantidad de petróleo que está produciendo el país no podemos llamarnos un país petrolero”, tampoco considera que puedan apoyar este producto y su derivados.
“Deben buscar el desarrollo, el cumplimiento de sus necesidades, tenemos que apoyarnos en la gente. Darle la oportunidad a los venezolanos, pues necesitamos un proyecto de país viable, un proyecto de país productivo. Tenemos que tener confianza en la gente y en las instituciones”, destacó.
Dijo que están en la búsqueda de un producto de excelente calidad para exportar al mundo, para satisfacer las necesidades de los venezolanos y poder vivir en un país más fiable.
Por su parte, Francisco Acevedo, el vicepresidente de Conindustria, dijo que están trabajando a niveles del 5 al 15% de capacidad.
“Hasta ahora no hay ningún indicativo que nos diga que esto va a mejorar a corto plazo”.
En cuanto al futuro, pronostica una caída del mercado, lo que implicará más empresas cerradas.
“Debe haber un cambio en las políticas económicas, la solución es que haya un cambio”, añadió.
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