Venezuela contaba con más de 400 industrias de confección textil, hoy día solo quedan 20, lo cual representa el 95% de la caída en comercio de ropa, afirmó Roberto Rimeris, presidente de la Cámara de la Industria del Vestido (Cavediv).
“Lo que originó los primeros cierres, fueron los controles de precio, de cambio y todos los controles que había para intervenir la industria hicieron que muchas de ellas no estuvieran operando”, añadió el líder gremial.
Señaló que algunas industrias del sector tenían un control de precios y de divisas, lo que les ha dificultado la obtención de esa moneda , obligándolos a vender su producción por debajo del costo, por lo que no sobrevivieron.
“Por otro lado, la otra parte de cierre que ha habido en los últimos años se debe a una disminución fortísima de la economía, que ha perdido más del 50% de su tamaño. Yo creo que ya debe estar al 60% de su disminución”.
En términos económicos explicó que este descenso no se ve ni si quiera en la guerra, “que en verdad es un nivel de tragedia”, es decir, que hay menos clientes que pueden comprar y con la hiperfinflación que se desarrolló a final de 2017 y 2018, y que se mantiene, afecta al sector.
“Aunque ha bajado este año por la restricción de la liquidez y hace que la gente dedique esos escasos recursos a las prioridades que tienen: alimentos, salud, medicina y transporte, entre otros”.
Asimismo, explicó que Cavediv solo agrupa las industrias formales del sector que están registradas en la Cámara y pagan sus impuestos.
Sin embargo, este gremio no agrupa a los fabricantes informales por lo que desconoce cuántos hay en el país.
Dijo que para retener a los trabajadores del sector hacen pagos de nóminas de forma mixta; es decir, una parte en bolívares y otras en divisas.
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