Todo comienza con un café. Ese es el lema de Café Grano a Grano, un proyecto agroindustrial que concibieron cuatro hombres enamorados de esa oscura infusión y fanáticos de la perfección. Ellos son Gustavo Boccardo, Miguel Ponte, Eneko y Mikel Fontova, quienes más que una marca buscan crear el café bandera de Venezuela.
Como todo producto que proviene de la tierra, el café, para que sea de calidad, su mimo debe iniciarse desde el mismo momento en que se siembra la planta y por esa razón en esta iniciativa han involucrado a productores, ingenieros agrónomos y recolectores. Al respecto, Gustavo Boccardo explica que forma parte de los estándares que se aplican con la esmerada selección de cultivadores que garanticen no sólo un extraordinario café, sino también la consolidación de la tradición cafetalera venezolana.
El café que utilizan procede del Valle de Mocotí, a 1.600 metros sobre el nivel del mar, en Santa Cruz de Mora, estado Mérida. Allá las plantas reciben las brisas andinas y crecen en un clima donde las frescas temperaturas aportan identidad a las bayas rojas. Entre las especies que se cultivan se encuentra la arábica, con las variedades Catuai y Caturra.
Otro aspecto importante es que café Grano a Grano cuenta con la Certificación Gourmet que otorga la Corporación Venezolana del Café y tratan el producto según los parámetros señalados por la Asociación de Cafés Especiales, SCA.
Los granos cuidadosamente seleccionados, identificados y clasificados llegan a Caracas, donde se tuestan en el laboratorio ubicado en Los Chorros. Allí siempre está preparada “La Negra criolla” que es el nombre que le pusieron a la tostadora de café.
Eneko Fontova, Miguel Ponte, Gustavo Boccardo y Mikel Fontova FOTO MAYTE NAVARRO
La selección, explica Eneko Fontova, es esencial pues a la máquina entra un gran cuyo tamaño y color deben ser los mismos, de esta manera el tostado también es homogéneo y se obtiene porque hay uniformidad en las semillas. El proceso se vigila cuidadosamente hasta alcanzar el tostado deseado. Se chequea como va cambiando el color del grano que pasa del verde al amarillo hasta llegar al dark brown. Así se obtienen las características organolépticas que hacen tan especial al café.
Para este equipo el secreto de una buena taza de café se encuentra en aplicar estrictos parámetros de cultivo, correcta recolección, selección minuciosa y culmina con el empacado, que se hace en paquetes aluminizados que lo protegen de cualquier agente externo y mantiene sus notas cítricas y sus aromas florales.
La responsabilidad social también se hace presente en Grano a Grano, ya que apoya a la Hoya Milagrosa, trabajo social que se realiza en la parroquia San Judas Tadeo.
Este producto se encuentra en las principales cadenas de supermercados, bodegones, tiendas de delicatesses.
Sus redes sociales son www.facebook.com/granovenezolano y @granovenezolano
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