Magaly Pérez
EL UNIVERSAL
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La guerra arancelaria que ha desatado el presidente de Estados Unidos Donald Trump, pone un poco en vilo al mercado petrolero porque trastoca a los precios en el mercado del crudo, el cual es sumamente sensible a las señales que se le envíen y los precios juegan en la medida en que se combinen tanto las variables económicas, como las variables políticas, las variables coyunturales y las variables estructurales.
La afirmación la hizo el economista y especialista en materia petrolera, Rafael Quiroz, quien indicó que todas estas variables forman lo que los especialistas en petróleo denominan “la formación de la estructura de los precios del petróleo”.
Señaló que al final los que “pagan los platos rotos” son los países miembros de la Opep, que tienen que jugar con esa variable de los aranceles en productos y en materia prima que no son el petróleo propiamente dicho, pero son elementos petroleros o los fundamentos del petróleo”.
Quiroz explicó, que hay que hay un factor muy importante que se debe tomar en cuenta aquí y es la situación bélica que hay en el mundo actualmente entre Rusia y Ucrania, así como también lo que pasa con Israel y Hamas, todas esas señales de guerra afectan el precio del petróleo que lo van a integrar una serie de variables, que a veces escapan a las mismas fuerzas del mercado petrolero.
Caso venezolano
“En nuestro caso, Venezuela se encuentra inmersa en los factores que afectan el precio del petróleo, porque de una u otra forma rebotan para acá las consecuencias, dado que la cesta petrolera venezolana se mueve al compás de cómo se mueven los marcadores principales como el caso del Brent de Europa, el West Texas intermediate, en Estados Unidos y la misma cesta Opep”.
Eso salpica al petróleo venezolano independientemente de que mantengamos todavía ciertos problemas o inconvenientes estructurales en cuanto a la producción del petróleo venezolano.
Producción local de petróleo
Según las estimaciones de la Opep, la última semana de mayo continuó en bajada lentamente, cerró en alrededor de un millón de barriles diarios aproximadamente porque bajó el aporte de Chevron a 165 mil barriles diarios y la zona de occidente estuvo produciendo 212 mil barriles al día, mientras que la zona de oriente estuvo en 120 mil barriles al día, y la Faja del Orinoco estuvo en 505 mil barriles diarios, según lo que reporta la Opep en su informe.
Para Quiroz la producción va a seguir bajando “y va a ser más notorio a partir de los meses de agosto y septiembre, cuando ya no se contabilicen los barriles de Chevron, ni tampoco los barriles que venían aportando las compañías Eni, de Italia, ni la empresa francesa ni la de la India que aportaban entre todos 105 mil barriles y sumado a la producción de Chevron, la producción venezolana bajará en aproximadamente 300 mil barriles diarios.
Refinación petrolera
En cuanto a la refinación, el especialista en petróleo considera que Venezuela va a seguir estancada en 180 mil barriles diarios para gasolina y otros derivados, lo cual es insuficiente porque no da para abastecer todo el mercado interno.
Recientemente hubo un acuerdo entre Venezuela y China para que los chinos manejen las tres refinerías que conforman el complejo refinador de Paraguaná, las dos de Falcón que son Amuay y Punta Cardón y la del estado Zulia, Bajo Grande.
“se espera que los chinos puedan sacar un resultado positivo, debido a que no se les están entregando puerto la cruz ni el palito, sino que los limitan al complejo refinador de Paraguaná que tiene una capacidad de refinación total de 950 mil barriles diarios, 630 que aporta Amuay y 320 que aporta Punta Cardón”.
Quiroz recordó que en el pasado se le otorgó a Irán la refinería en el Palito, donde estuvieron 2 años y no pudieron sacar resultados positivos.
Aranceles de EE.UU.
El economista se refirió también a las consecuencias de esa guerra arancelaria que ha desatado el presidente de EEUU Donald Trump, y aseguró que al final eso no le dará buenos resultados, porque el problema básico, el cual quiere arreglar Trump, “es que el país tiene un gran desequilibrio en la balanza comercial en cuanto a productos y subproductos elaborados o semielaborados de importación y exportación, es la mayor cantidad de productos que ellos reciben como importación que lo que ellos exportan”.
El presidente Trump ha tratado a través de la aplicación de mayores aranceles de frenar esas importaciones que llegan al mercado norteamericano y favorecer un poco más al productor nacional y estimular así sus exportaciones.
“Pero la verdad es que, si a ellos, es decir a Estados Unidos, se les da el mismo tratamiento, estoy hablando de países altamente consumidores de productos norteamericanos como es el caso de China y Europa, si ellos aplican la misma política o el mismo tratamiento, en cuanto a aranceles se refiere, no creo que Estados Unidos pueda salir muy victorioso de ello”, dijo.
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