Los Ángeles.- Brusdar Graterol lanzó su segundo bullpen de la pretemporada ante la mirada complacida del manager de los Dodgers de Los Ángeles, Dave Roberts, y su coach de pitcheo, Mark Prior. Ambos están entusiasmados con lo que pueda hacer el derecho en 2020, reseñó lvbp.com.
“Un chico con ese repertorio, le dará un aspecto diferente a nuestro bullpen”, comentó Prior al periodista Jorge Castillo, de Los Angeles Times. “La capacidad de aportar ese tipo de potencial e impacto en el juego, sólo será algo bueno para nosotros”.
Graterol debutó en las Grandes Ligas el 1 de septiembre, y mostró todo su talento en 11 relevos, en los que exhibió una recta de 100 millas por hora y una slider mordiente, mientras que brilló en el primer juego de la Serie Divisional de la Americana, en un inning en blanco contra los Yanquis, en el que ponchó a dos.
En principio, Graterol había sido enviado a los Medias Rojas de Boston, en el canje a tres bandas, que se planteó con Mookie Betts como figura central, pero Boston no aceptó al derecho debido a su historial médico.
Saludable y utilizándolo como relevista, Roberts podrá monitorear mejor su carga de trabajo durante 2020. “Por lo que escuché, su condición es benigna y asintomática”, apuntó el piloto Roberts. “Luego ves que tiró 100 mph en la postemporada, hablas con el jugador y él dice que se siente bien. Se ve genial”.
Finalmente, después de las circunstancias que lo llevaron a una nueva organización y con un plan a corto plazo en sus funciones, Graterol se siente aliviado.
“Un chico con ese repertorio, le dará un aspecto diferente a nuestro bullpen”, comentó Prior al periodista Jorge Castillo, de Los Angeles Times. “La capacidad de aportar ese tipo de potencial e impacto en el juego, sólo será algo bueno para nosotros”.
Graterol debutó en las Grandes Ligas el 1 de septiembre, y mostró todo su talento en 11 relevos, en los que exhibió una recta de 100 millas por hora y una slider mordiente, mientras que brilló en el primer juego de la Serie Divisional de la Americana, en un inning en blanco contra los Yanquis, en el que ponchó a dos.
En principio, Graterol había sido enviado a los Medias Rojas de Boston, en el canje a tres bandas, que se planteó con Mookie Betts como figura central, pero Boston no aceptó al derecho debido a su historial médico.
El venezolano se sometió a una cirugía Tommy John en 2016 y se perdió dos meses con una lesión en el hombro en 2019. Boston lo quería como abridor y determinó, que por sus antecedentes, usarlo en ese rol era arriesgado.
Saludable y utilizándolo como relevista, Roberts podrá monitorear mejor su carga de trabajo durante 2020. “Por lo que escuché, su condición es benigna y asintomática”, apuntó el piloto Roberts. “Luego ves que tiró 100 mph en la postemporada, hablas con el jugador y él dice que se siente bien. Se ve genial”.
Finalmente, después de las circunstancias que lo llevaron a una nueva organización y con un plan a corto plazo en sus funciones, Graterol se siente aliviado.
“No sabía qué hacer con esa situación (ser cuestionado por Boston, mientras Minnesota trataba de cambiarlo). Sentí que tenía un peso encima. Ahora estoy realmente agradecido por mi nueva familia aquí y listo para darlo todo”.
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