Durante la postemporada, la ofensiva colectiva deslumbró más que el pitcheo, es por ello, que cada conjunto que selló su boleto a la semifinal contó con bateadores clave que indujeron a que su equipo se inscribiera en la siguiente fase.
La oportuna producción de Willians Astudillo y Luis Jiménez permitió que los Caribes de Anzoátegui remontaran un déficit de 0-2 ante los Navegantes del Magallanes e hilaran cuatro triunfos para avanzar a la semifinal.
Astudillo fue el cacique de la tribu en la serie frente a los Navegantes. El grandeliga de los Mellizos de Minnesota lució inmenso ante el pitcheo eléctrico con average de .435 (líder bate de la postemporada), resultado de conectar 10 imparables, incluyendo un jonrón, en 23 turnos consumidos. También remolcó cinco carreras, anotó seis y, como si fuese novedad, no se ponchó.
Por su parte, Jiménez se reivindicó con la tribu oriental, luego de ligar para .172 en la ronda eliminatoria, bateando para .375, producto de disparar seis indiscutibles, incluyendo un vuelacercas y un doble en los 16 turnos al bate que consumió en la instancia de playoffs.
En total, la tropa que dirige Omar López, lideró el departamento colectivo de average en la postemporada con promedio de .297, debido a que Luis Sardiñas (.381), Jiménez (.375) y Alexi Amarista (.350) junto a Willians Astudillo, que encabezó ese renglón, culminaron entre los 10 mejores averages de la postemporada.
Para los Cardenales de Lara, Herlis Rodríguez fue la bujía ofensiva a la hora de remolcar carreras. El tachirense produjo siete rayitas, registró siete y bateó para .300, gracias a los seis imparables que conectó, dentro de los cuales destacaron un bambinazo y un triple en 20 viajes a la caja de bateo.
Rangel Ravelo también contribuyó con la causa crepuscular, al culminar la serie ante Bravos de Margarita con promedio de .368, un batazo de vuelta completa y seis carreras remolcadas.
En la nómina de los Leones del Caracas, Jeffrey Báez, Harold Castro y Franklin Gutiérrez destacaron al producir 14 de las 24 carreras que hicieron los capitalinos.
Báez fue el mejor impulsor con seis, Castro produjo cinco y Gutiérrez remolcó tres. Aparte de las carreras empujadas, Báez tuvo como atributo batear para .409. Asimismo, Castro dejó average de .333 y Gutiérrez definió el segundo partido de la serie ante Aragua con un cuadrangular en el noveno acto.
La dupla Reynaldo Rodríguez-Delmon Young, de los Navegantes del Magallanes, le hizo daño a la tribu, pero en el partido decisivo, devastaron por completo el pitcheo de la escuadra bengalí impulsando hasta seis carreras entre ambos. En definitiva, dispararon tres cuadrangulares y remolcaron ocho carreras por lado, en su andar por los playoffs frente a Caribes y Tigres.
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