Houston.- El primera base venezolano Jesús Aguilar recuperó su mejor toque de pelota y se convirtió en el protagonista de la jornada de postemporada de las Grandes Ligas al producir tres carreras y obligar a que la serie por el título de la Liga Nacional se defina en el decisivo séptimo partido.
Aguilar remolcó tres carreras para los Cerveceros de Milwaukee que vencieron 7-2 a los Dodgers de Los Ángeles y empataron la serie (3-3) por el campeonato de la Liga Nacional, que disputan al mejor de siete juegos.
El ganador de esta serie deberá enfrentar en el Clásico de Otoño a los campeones de la Liga Americana, los Medias Rojas de Boston, que una noche antes eliminaron (4-1) a los campeones defensores de la Serie Mundial, los Astros de Houston.
Aguilar pegó casi perfecto al ir cuatro veces a la caja de bateo y hacer contacto con la bola en tres ocasiones, terminó con tres carreras empujadas de las siete que consiguieron los Cerveceros y llegó a pisar el plato dos veces. Nada que ver con los tres imparables en 15 turnos al bate que había tenido desde el segundo al quinto partido de la serie, y además los contactos fueron para un par de dobles que pegó la pasada noche en el Miller Park de Milwaukee ante el delirio de los seguidores de los Cerveceros.
"Contra un equipo tan batallador como el de los Dodgers, yo creo que hicimos un excelente trabajo", destacó Aguilar al concluir el partido. "La falta de producción en los tres partidos anteriores no era algo normal".
Después de anotar apenas tres carreras entre sus derrotas en los Juegos 4 y 5 en Los Angeles, los Cerveceros contaron con aportes importantes al bate de sus piezas principales, que tuvieron como referencia el despertar de Aguilar.
Esos compañeros fueron los jardineros Lorenzo Cain, Christian Yelich y Ryan Braun junto con el tercera base Mike Moustakas, que brindaron una ofensiva de lujo, la que estaba esperando el piloto de los Cerveceros, Craig Counsell, si querían seguir con vida en la serie e intentar ganarla.
En el caso de Aguilar, el maracayero llamó la atención al dar sus valiosos batazos a la banda contraria, superando de manera exitosa con los pitcheos en la parte externa del plato.
"En el primer episodio, Aggie tomó lo que le dieron", comentó Counsell acerca del doble conectado por Aguilar frente al abridor de los Dodgers, el zurdo surcoreano Hyun-Jin Ryu.
"Lo hizo toda la noche, tres imparables a la banda contraria".
Con ese doble en el primer episodio a Ryu, Aguilar no sólo empujó las primeras carreras de los Cerveceros -algo crucial después que los Dodgers se habían ido arriba 0-1 en la primera parte de la entrada-, sino también rompió una racha de 7-0 con corredores en posición de anotar en lo que va de playoffs.
Ahora Aguilar y el resto de los Cerveceros tratarán de seguir el ritmo cuando en un solo partido se decida el campeón del Viejo Circuito y pase a la Serie Mundial para medirse con los Medias Rojas.
"Nosotros estamos batallando aquí, lo demostramos", reiteró Aguilar. "Yo creo que nadie pensó que nosotros íbamos a llegar a un Juego 7, pero estamos jugando con el corazón y cuando tú juegas con el corazón, las cosas salen bien".
Aguilar hizo posible que los Cerveceros jueguen su primer juego número siete en una serie de postemporada desde que perdieron ante los Cardenales de San Luis en 1982 en su única aparición en una Serie Mundial.
El campocorto Orlando Arcia conectó una vez en tres encuentros con los lanzadores.
Mientras que el jardinero cubano Yasiel Puig, a pesar que los Dodgers perdieron, alineado como jardinero derecho y séptimo bate, en el Miller Park, rompió una marca de la franquicia del equipo en partidos jugados de playoffs.
Puig disputó su partido número 52 en playoffs/Serie Mundial, y superó la marca de Andre Ethier, quien jugó en 51 encuentros en ocho postemporadas con Los Angeles, entre el 2006 y el 2017.
El jardinero cubano es el único jugador de posición que ha sido parte de cada una de las últimas seis ediciones de los Dodgers que han ganado la División Oeste de la Liga Nacional.
El oriundo de Cienfuegos llegó al viernes con línea de bateo de .279/.358/.462 en playoffs, vistiendo el uniforme de los Dodgers, con cinco dobles, tres triples, tres jonrones y 16 impulsadas.
Sus 43 imparables lo colocan en el quinto lugar de todos los tiempos de los Dodgers en dicho departamento.
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