"Para mí no existen límites, cuando me propongo algo"
Randi Berroterán es un atleta consagrado en maratones con silla de ruedas. Desde los 11 años sufre de Osteoporosis severa
MARISOL DECARLI
"En mi vocabulario personal no existe la palabra 'no puedo'. Mi límite es el cielo. Me propongo objetivos y los cumplo", señala Randi Jordan Berroterán Morillo, quien es corredor en silla de ruedas en maratones, estudia Comunicación social y es dueño de un negocio de chucherías que opera desde su casa en el municipio Baruta.
Randi tiene actualmente 26 años de edad. Relata que cuando era un adolescente practicaba equitación y ganó varias competencias como jinete. Ahora lleva más de 10 años participando en maratones de Caracas. "Practicar deportes me hace sentir muy bien. Es muy bonita esa sensación. Boto todo el estrés que a uno se le acumula".
Cuenta que el año pasado se sometió a una intervención quirúrgica en el manguito rotador del hombro que se le había gastado debido al esfuerzo que debe hacer con los brazos para impulsar su silla en las carreras. La operación fue exitosa y le tomó varios meses de reposo y rehabilitación. Ahora se prepara para retomar las competencias.
Usa silla de ruedas para desplazarse desde los 11 años pues sufre de Osteoporosis severa desde pequeño. A quienes presentan alguna discapacidad les recomienda "escoger un deporte y practicarlo, trabajar y estudiar. No darse nunca por vencidos".
Randi Berroterán dedica buena parte de su tiempo a crecer como deportista. Entrena lunes, viernes y sábados en Los Próceres, en el Parque del Este, en La Guaira, en Los Caracas. Practica en subidas, en bajadas, en curvas y en terrenos planos. "Entreno con barras, hago ejercicios de resistencia para fortalecer el pecho y la espalda, los brazos y el tronco. No fumo ni bebo. Y debo proveerme de una buena alimentación. Cuento con el apoyo de mi madre y de mi pareja", recalca. Tiene un hermano que está fuera del país que también le ayuda desde donde reside ahora.