En un ambiente cargada de profunda emotividad, los alumnos pertenecientes a la promoción número 39, del colegio San Agustín de Caricuao, presentaron esta semana, su obra teatral titulada: “Así en la tierra como en el cielo”.
Basada en la pasión muerte y resurrección de Cristo, los estudiantes deleitaron al público en las instalaciones del Centro de Estudios Latinoamericanos Rómulo Gallegos conocido como el Celarg, esto con el fin de recaudar fondos para los gastos de su promoción.
Un elenco de 40 jóvenes, dieron vida a los distintos personajes, llevando a las tablas de una manera diferente las escenas, “ lo difícil es que ya las personas se conocen la historia, el reto está en hacerlo con un toque especial”, expresó Juditma Camejo, directora general del grupo teatral Casiaco.
Con una lucha contante entre ángeles y demonios, dio inicio la representación que lleno de asombro a los espectadores, posteriormente una joven en telas aéreas, que representó al Espíritu Santo impacto a los allí presente. Así mismo, las diversas interpretación musicales, ofreció al público ese toque juvenil, expresaron los allí presentes.
Esta representación, forma parte de la tradición de los jóvenes de este plantel, los cuales desde la promoción número 30, ofrecen al público obras con diversas temáticas, expresó Camejo.
De acuerdo con la directora general, “el teatro es una forma atractiva y diferente que sirve como medio, para llenar a los jóvenes de valores, librándoles así de ese tiempo de ocio, es recordarles que aquí se pueden sentir como una gran familia y cuando permeas en ellos puedes ir dejándoles un legado que queda para la vida…”, subrayó.
Por su parte Andrés Bonilla, director de la obra, expresó: “todo comenzó con la presentación de la vida de San Agustín en el colegio, fue allí donde brotó la idea de crear un grupo teatral dentro del colegio y así fue como nació esta gran idea” comentó el joven actor.
El teatro es arte, una pieza te puede cambiar la vida, en ella el público puede ver su propia historia de vida en el mundo de las tablas… expresó Bonilla.
La invitación a los jóvenes es a ver la vida de una forma diferente, donde a pesar de las dificultades en el camino, siempre existe un motivo para agradecer, motivar y sobre todo ”amar sin medida como decía San Agustin”, comentó Andrés.
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