El progreso y despliegue de la capacidad instalada en energía renovable de Asia Pacífico impulsa la transformación energética. Sectores como la energía hidroeléctrica a gran escala, así como, la bioenergía para biomasa, biogás, biocombustibles líquidos para la calefacción cocina y electricidad, en 2023 representan la mayor capacidad instalada de energía renovables. En panorama general de la región, Myanmar, Fiyi, Isla de Viti Levu, Tonga, Sri Lanka, Filipinas, Indonesia y Pakistán son los países que mejor contribuyen y aceptan el cambio de la matriz energética en Asia Pacifico. No obstante, para las energías renovables modernas como: energía solar fotovoltaica, energía eólica terrestre, energía geotérmica y energía termosolar, la mayor capacidad se concentra en China, India, Japón, Tailandía y República de Corea, con un despliegue de 23% a 46% en cuota y capacidad de generación de 988.9 GW.

Todo se apoya en la distribución autónoma de las redes nacionales de energía renovable mediante la combinación de contadores inteligentes más tecnología de gestión de respuesta a la demanda. Con los contadores en red inteligente, la red energética para generar electricidad reacciona automáticamente, ya que, la cadena de valor de la energía es más dinámica y permite ahorro a largo plazo redistribuido no lineal. Ello supera el patrón de transferencia tradicional distribuidor- minorista- usuario final de los contadores manuales en Asia Pacífico y otros países asiáticos que usan contadores inteligentes.

De esta forma, con un mercado de oferta de energía compuesto por contadores inteligentes, el usuario final de Asia es generador de energía para retroalimentar la generación dentro del ecosistema energético que satisface necesidades de clientes B2B y B2C más diversificados. En Asia Pacífico y otros países asiáticos una ventaja es la afluencia de recursos energéticos renovables distribuidos, que se basan en la creación de hardware modernos para contar y almacenar en baterías que generan energía, pero también, cambios en el mercado.

Las centrales eléctricas virtuales y la respuesta a la demanda, son dos de los grandes cambios en el mercado de energía renovables. Cambios positivos, ya que, reducen costos en la generación de energía, con nuevos operadores y las nuevas tecnologías que apoyan alta competencia y con ello abaratamiento de los costos de producción. No obstante, de lo mencionado surge un desafío para los inversionistas en la región, el de captar valor en cada etapa del ciclo de vida de la energía, para lo cual, es obligación avanzar en crear mejores capacidades tecnológicas para satisfacer las demandas de nuevos productos y sercicios energéticos en la región.

Una opción real es la de proporcionar mejor retención en el valor de las inversiones cuyo beneficio sea mutuo entre minorista [generador] y consumidor [cliente o usuario]. En equilibrio la relación, el costo de salida y el valor de entrada al nuevo mercado, será menor en contraste del mercado tradicional. Puesto que, el nuevo sistema será flexibles e incorporará a los usuarios de acuerdo al producto energético deseado en tiempo real.

Sin embargo, el persistente desafío para el emergente mercado de energía renovable en la región es enfrentan la conformación de la industria en la transición energética. Si bien, la evolución de la energía renovable crece continuamente en 2023, en la región los nuevos productos, servicios y recorrido del cliente se ejecuta mediante las plataformas heredadas del sector tradicional. Cuya solución es, reconocer la complejidad y la configuración de integración modular en Smarts industries de inteligencia artificial y aprendizaje automático, con base a la infraestructura de la industria tradicional.

@ajhurtadob